El árbol ya no existe,
un leñador eterno
le partió el alma.
Habló
del adiós
jamás pronunciado.
"No es vida
no arrullarla entre mis ramas,
no ser su nido de siempre,
no acariciar con una gota de rocío
su cuerpo,
no confundir mi savia antigua
con su sangre de ave nueva".
El árbol ya no existe;
lo miré caer junto a las hojas
del último otoño.
un leñador eterno
le partió el alma.
Habló
del adiós
jamás pronunciado.
"No es vida
no arrullarla entre mis ramas,
no ser su nido de siempre,
no acariciar con una gota de rocío
su cuerpo,
no confundir mi savia antigua
con su sangre de ave nueva".
El árbol ya no existe;
lo miré caer junto a las hojas
del último otoño.
Miér Abr 17, 2024 4:52 pm por caminandobajolalluvia
» Déjame unir mi mano con la tuya...
Miér Abr 17, 2024 4:50 pm por caminandobajolalluvia
» Tu rostro...
Lun Abr 15, 2024 3:55 am por caminandobajolalluvia
» Memoria de tu luz, cuerpo bohemio...
Mar Abr 09, 2024 9:05 pm por caminandobajolalluvia
» Mi ciudad
Jue Abr 04, 2024 1:08 pm por caminandobajolalluvia
» Mujer -reclamo tus rosas-
Jue Abr 04, 2024 1:02 pm por caminandobajolalluvia
» La huella del amor...
Jue Abr 04, 2024 1:01 pm por caminandobajolalluvia
» Desnuda cadencia...
Jue Abr 04, 2024 12:59 pm por caminandobajolalluvia
» Son claveles...
Jue Abr 04, 2024 12:55 pm por caminandobajolalluvia