El ultimo adiós…

He aquí pues…aquí estoy
En un cuarto gimiendo
Las última letras de su letal ¡adiós…!

Aquí me encuentro acostada llorando
Amargamente mis desgracias por la cual
No volveré a reír…
Ni la aurora que roza mi ventana
Me hará sonreír…

Era tan deslumbrante ver como
Podía tocar el alba, con solo
Decir ¡te amo…!
Y que al corto rato me llevaba
A la luna y alcanzar las estrellas

Era obsesionante ver su cuerpo
Cerca del mío…
Respirando el mismo aire;
Que llenaba este vacío al final…

En cambio hoy todo acabo;
Ni el roce de su piel me acuerdo;
Y… como para continuar gimiendo
Sola y en mi cuarto suena como
El rayo de la tormenta, su lealtad
Y frío…
¡Adiós!

[b]Los adioses, si son definitivos, es verdad que hacen mucho daño. Mas, no hay mal que cien años dure. Buen poema, amiga. Abrazos.

Aquí me encuentro acostada llorando
Amargamente mis desgracias por la cual
No volveré a reír…
Ni la aurora que roza mi ventana
Me hará sonreír…

jaja eso decia yo cuando estaba triste, pero te digo la verdad amiga poeta, es mejor sonreir y estar con las personas que en verdad te quiere, estar alrededor de locos y locas jaja nos vemos me encanto tu poema nos vemos

Magali, la vida tiene mucho sentido, la risa hace mejores personas, no la olvides, las lágrimas en esos momentos solo sirven para lavar la retina y purificar el desconsuelo.
Cordial saludo, te abrazo.

aunque todo parezca oscuridad, si no te valoró, si no te amó... créeme este adiós es una puerta a la felicidad... todo depende de como se enfoque... un beso, sentidos versos!