Acongojado tras la bruma del oriente
cual zafiro la menguante luna
aclama un eco que trastoca errante
tu suspiro cual misógina ninguna.
Era del vespertino aroma la silueta
de un verso herido cual espada
de amor naciente la desierta
boca que resguarda la llamada.
Luciente eco que trasluce el oro y cauce
de la sal derramada por tu boca
que desnuda el soliloquio plata roce
de una estrella tu cabello toca.
Distintivo claro que la espuma abruma
la distancia al corcel de los rocíos
la miel que provoca la suma
los claveles del valle cual estíos.
Naciente verso y espuma transparente
cual oro terso y dócil del letargo,
cual suspiro más cauto más amargo
errante nube de silencio, recurrente.
Cual efímera pasión cual nube ausente
cual distinta aurora en el poniente
cual dócil legua cual nívea cual temprana
la nube etérea cual púrpura, cual grana.
cual zafiro la menguante luna
aclama un eco que trastoca errante
tu suspiro cual misógina ninguna.
Era del vespertino aroma la silueta
de un verso herido cual espada
de amor naciente la desierta
boca que resguarda la llamada.
Luciente eco que trasluce el oro y cauce
de la sal derramada por tu boca
que desnuda el soliloquio plata roce
de una estrella tu cabello toca.
Distintivo claro que la espuma abruma
la distancia al corcel de los rocíos
la miel que provoca la suma
los claveles del valle cual estíos.
Naciente verso y espuma transparente
cual oro terso y dócil del letargo,
cual suspiro más cauto más amargo
errante nube de silencio, recurrente.
Cual efímera pasión cual nube ausente
cual distinta aurora en el poniente
cual dócil legua cual nívea cual temprana
la nube etérea cual púrpura, cual grana.
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