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por Extended, versos, mis alas, una poesía!
Y al admirar tu rayana pleitesía
joven del locuaz almirante que bosqueja
nutra el viento su alma que ya vïeja
endecha sutil aclara, y sobre el viento
pernocta su latido el entrecejo de su ceja
cual indómita llama, su argumento
de toque amura y lanza luna en reja!
Aclara su dulzura el vuelo infame
que el nocturno arrebol de mis mejillas
toca sus alas y esbelta, sobre sillas
aclara su sudor vüelto derräme…
Muda, ya vïento, el sutil enclave
que su purpúreo acicalado bentevëo
no separa de la rüina de aquél ave
su silente trocador de vano asëo
Que en el agua derramada de su llave,
entonación menguada de su bruma,
acicalada a sú nevada fortuna, clave
de su sol la misma garantía que consuma
en su adusta mirada aquél clavel endrino
pasajero, de mi voz y su destino
donde atropella su fauce destinada
y que convïerta de la sal, sal empapada…
Arruina un plectro soñador y solicita
el verso de mi amor. Trova y engaño,
lenta flor, tan muda que a mi daño
sublime vüelo trueca en soles que recita
su süeño Golondrina, que acervo no descuida
la paz y el estro de sú mirada instintiva
a su süelo agobia de su treno, huida
que al tronar el cedro el rayo fue la fugitiva…
Cabalga mi montura yace alada,
de tu confín perpetuada la mirada,
esbelto rocín de hielo cuyo viaje
entona las alas de mi ultraje,
en boinas de amianto, nacaradas
y, la estólida gema de sus alas
arquea sutil norma, amapolas platëadas
en su carrera de viento y flor, cual me recalas…
Proclive a amarte tras el hecho de tu juicio,
alado he de romper la cláusula, que es vicio…
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