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por Estrellas en tu rostro
Flotando en el adviento de tu rostro
tus ojos pueden ver la fortaleza
del canto del ruiseñor, y su belleza
alba y estrella, blancura de alabastro
donde funde al elocuente mar inmerso
de las alas de su canto, y en la bruma
noche cede, cálida la espuma
de un encuentro con tu beso, y en mi verso,
Sola alba lleva vuestro encanto
en el añil desnudo leve de su fragua
donde diáfanas estrellas en el agua
son carbunclos y peces mientras tanto
tus besos y el reclamo de tu süeño,
iridiscente baña el légamo del alba
confundido en tu belleza me despeño
contra las álgidas marëas, lenta enalba…
Apocas risa y reverberas el ocaso
de una ferviente noche oculta y en tu abrazo
celadas nieves desuellan en su ahínco
murmullos de cristal son flores, cinco
penas de mudanza en el estío
donde tu brazo quiere miel y darme brío
entre las flores y nuncios oropeles, rüines
distancia a tu perfume de jazmines…
Son noche oculta, el brillante de tus ojos
nïeva en su pudor la misma estrella
que se asombra de sí misma y no se empella
en el ala de su vüelo, a mis despojos
donde llueve casta ironía al darme celo
el horizonte de sömbra quiere vuelo
y en su virtud, asida noche nos reclama
sumida al este del perfume que te ama…
Elevo casto palpitar a mi simiente
sobre la tea que es furor la misma espada
donde diluye el mismo sol la misma amada
el rojo sello, el reverbero de su frente…
Las olas saben de tu piel en armonía
con el suntüoso azor de viento en tu cabello,
y en el licor de tu desnudo, y en tu cüello
la sombra de tu cuerpo es alba mía…
Elevas alas en virtud de tu sollozo,
en tu cabello puede el mar ser mi alborozo…
Flotando en el adviento de tu rostro
tus ojos pueden ver la fortaleza
del canto del ruiseñor, y su belleza
alba y estrella, blancura de alabastro
donde funde al elocuente mar inmerso
de las alas de su canto, y en la bruma
noche cede, cálida la espuma
de un encuentro con tu beso, y en mi verso,
Sola alba lleva vuestro encanto
en el añil desnudo leve de su fragua
donde diáfanas estrellas en el agua
son carbunclos y peces mientras tanto
tus besos y el reclamo de tu süeño,
iridiscente baña el légamo del alba
confundido en tu belleza me despeño
contra las álgidas marëas, lenta enalba…
Apocas risa y reverberas el ocaso
de una ferviente noche oculta y en tu abrazo
celadas nieves desuellan en su ahínco
murmullos de cristal son flores, cinco
penas de mudanza en el estío
donde tu brazo quiere miel y darme brío
entre las flores y nuncios oropeles, rüines
distancia a tu perfume de jazmines…
Son noche oculta, el brillante de tus ojos
nïeva en su pudor la misma estrella
que se asombra de sí misma y no se empella
en el ala de su vüelo, a mis despojos
donde llueve casta ironía al darme celo
el horizonte de sömbra quiere vuelo
y en su virtud, asida noche nos reclama
sumida al este del perfume que te ama…
Elevo casto palpitar a mi simiente
sobre la tea que es furor la misma espada
donde diluye el mismo sol la misma amada
el rojo sello, el reverbero de su frente…
Las olas saben de tu piel en armonía
con el suntüoso azor de viento en tu cabello,
y en el licor de tu desnudo, y en tu cüello
la sombra de tu cuerpo es alba mía…
Elevas alas en virtud de tu sollozo,
en tu cabello puede el mar ser mi alborozo…
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