Flor de un día

Flor de un día


Ayer amé y me amaron.

Navegan en mi mente

crepúsculos dorados

sobre el mar desbordados,

sombreando una pasión ardiente.

Fantasías burlonas rondan fugazmente.



Ayer amé y me amaron.

¡Qué hermoso ese amor apasionado!

Piel, química, descubrirse enamorado,

música irreverente que mueve al pecado.


Borrachera de la mente,

mirada ardiente, beso robado...

Esa sensación caliente

de tu cuerpo flotando.



Esas ansias de volar eternamente,

esas ganas de que dure para siempre...

La chamarasca dejará de arder

no importa cuándo... Será pasado.



Son guiñapos aquellos no olvidados.

¿Deshechar los recuerdos?

¿Quién no vive del pasado?

¿Sino cómo resguardarnos?

Son las voces que guardamos

para no cometer errores aberrados.



¡No es el amor el fuego de un instante!

Inconstante y dolorosa porfía

reto poco sublime del petimetre.

¡Necio, busca flor de un día!.



Matilde Maisonnave

Del libro "Mariposas en el volcán"