LA NEGRA Y LA POESÍA

IV

La Negra y la poesía

Ahora a la Negra se le dio por la escritura. Me empezó a mostrar sus dotes, pero de otra forma a las que acostumbra. Y escribe con la “zurda”, como yo. Mientras escucha bajito un tema escrito por Alí Primera y cantado por Los Guaraguao, llamado “Las Casas de Cartón”, por ratos lee y por ratos escribe. Cruza sus piernas, y ahí se me termina toda la concentración. No sé si mirar a la novel escritora o seguir con mi lectura recién empezada de Eduardo Galeano.
Desde hace días que ella viene amontonando libros. Yo pensaba que eran de aventuras o poesías de amores. No. Ella eligió libros de historia de Sudamérica, de los pueblos originarios, y todo lo relacionado con el sometimiento de esta gente, que somos nosotros, y que todavía viene sufriendo desde hace varios siglos. Le interesa el tema de la “igualdad y la justicia”, según me dice, “para que se acabe el hambre provocado por los gringos” y “porque hay mucha gente sufriendo y nadie dice nada”; Y agrega que más adelante, cuando ella esté más canchera, se iba a poner a leer y escribir de enamoramientos, flores, pajaritos, lunas y estrellas.
Yo no le digo nada, porque ella es como yo, que me siento un iluso, esperanzado en una “revolución latinoamericana de pueblos hermanos”.
Y ahí está mi Negra, se la pasa escribiendo y cruzando las piernas, y yo, mirándola y aprendiendo de ella…