A DE LUGAR.‏

Es inaudito lo que los cielos han bendecido
y lo que las eternidades han deseado,
inaudito por ser poco lo que ignoro
en las líneas paralelas que elaboras de antemano,
es como beber una jarra de vino a las seis de la tarde
es como seguir rastreando debajo de las mesas
pues el entusiasmo quedó cuadriculado
por detrás y por delante
y hasta arriba de las cejas,
esparciste tus números sobre todas las mesas
y ya nunca volvieron seis y seis, cuatro y cuatro
a ser lo mismo,
después de la batalla aseguran que las cosas envejecen
se arrugan los papeles como un sorbo incipiente
y nada es tan elemental como parece,
duermo y me incorporo
retorno al pan y al vino
sumo diez y te juro,
que cuando el mundo acabe
seguirán siendo diez,
porque lo que cambia es la historia solamente.

y todo es siempre lo mismo... depende del toque que le de cada uno de nosotros... tus versos me deja reflexionando!

Por mucho que pensemos Lorena, creo que siempre hay preguntas difíciles de contestar, y de ahí salen poemas, palabras, pensamientos y sentimientos que ni siquiera uno mismo sabe interpretar.
Un abrazote querida Lorena.