Majestuosa y cósmica

Majestuosa
en su luminosa quietud,
la diosa cósmica premia
y castiga
con rayos de variada luz.

Siguiendo
sagrados preceptos del cosmos,
la estrella,
central,
celosa ,
sateliza en exótica danza
y nos somete
al infalible ciclo de la vida
y la muerte.

La diosa,
encandila y confunde
prometiendo eternidad.
Mas no puede,
se engaña.
También las diosas
alguna vez
mueren.

[b]Así es, amigo; también a las estrellas les llega algún día su final... Mientras tanto, debemos disfrutar de ellas. Buen poema, caminante. Abrazos.

ojala no muera pronto... porque morimos con ella...

Gracias amigos Recaredo y Lore.
Lamentablemente las estrellas,
niñas mimadas de la creación,
morirán precisamente por eso,
por haber sido creadas.
Pero más lamentable aún es que nosotros,
los autodenominados "hechos a su Imagen",
mataremos nuestra Tierra mucho antes que Dios duerma al Sol.
Carajamente antes!!!