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por Quetzalcoatl Vallejo Miér Jun 30, 2010 7:51 pmLA ANTEPENÚLTIMA…
Casi media vida de construir estupideces
y no me canso.
Y aquí va otra…
“La antepenúltima”.
¿Qué es escribir para quien no te lee?
¿Para quién no le importas?
¿Y qué importa?
Si al final
son más los libros ignorados y cerrados
que aquellos,
los leídos.
Si al fin de tanto hacerlas
tarde o temprano
las palabras terminarán por desgastarse.
Algún día descubriremos de nuevo
que ya se ha dicho todo.
Pero nosotros insistimos en que no.
Y hablamos
y hablamos
y escribimos
y nos admiramos
como si fuera la primera vez que sale el sol.
De repente sí dan ganas de callar.
De echarse en la arena de la plaza
como un toro atravesado
cansado de pelear.
De repente dan ganas de ser telépata
y no autómata.
Papalote y no bandera.
En fin,
que vaya este escrito a donde le dé la gana ir.
Por que yo sé muy bien
que a ella no llegará.
En fin…
¡Y que más da!
Es mejor hacerse a un lado entre dos que se aman
y bendecir su amor
e irse a la chingada.
Es mejor largarse y reinventarse.
Dejarte crecer el bigote y la barba.
Hacerte un tatuaje
que le miente la madre al mundo entero.
Y llenar de globos y caramelos
al primer niño hambriento de amor
que se te acerque.
Renegar de tu padre
aunque con el tiempo
te das cuenta
que cada vez más te le pareces.
En fin…
Yo quisiera que todo esto nadie lo leyera,
que fuera solamente para ella.
Pero también sé
que al final
medio mundo lo leerá.
Menos sus ojos
menos su mente,
nunca su pensar.
Yo quisiera que estas letras
llevaran inmersas un beso
que le besara sus labios del rostro
y los del sexo.
Pero ella insiste en ignorar.
Duele hacerse el fuerte y decir que…
“los hombres duros nunca lloran”.
Pero eso es sólo hasta llegar a casa
y estar a oscuras
y a solas.
¡OK muy bien, ya me largo…!
Sólo permítanme decir:
¡Bendito sea pues, el amor
en todas sus facetas
y en todos sus milagros!
El del pájaro a su hembra
el de Adán a Eva
el del hombre al sol
el de Dios a vos
el de la bandera
el de la canción.
El de la novia buena
o la infiel
que antes durante y después de ti
le abrió su pierna a cien.
Y el de la ramera,
que lo hace por amor a sus hijos
y para poder comer.
Bendito sea el amor de ella hacia él.
Y el de él…
Si,
¿por que no?
También.
Vaya pues dedicado este intento de poema
a su persona entera
aunque sé perfectamente que nunca lo leerá
y si lo llegara a hacer,
sé muy bien también,
que jamás lo entenderá.
.
Casi media vida de construir estupideces
y no me canso.
Y aquí va otra…
“La antepenúltima”.
¿Qué es escribir para quien no te lee?
¿Para quién no le importas?
¿Y qué importa?
Si al final
son más los libros ignorados y cerrados
que aquellos,
los leídos.
Si al fin de tanto hacerlas
tarde o temprano
las palabras terminarán por desgastarse.
Algún día descubriremos de nuevo
que ya se ha dicho todo.
Pero nosotros insistimos en que no.
Y hablamos
y hablamos
y escribimos
y nos admiramos
como si fuera la primera vez que sale el sol.
De repente sí dan ganas de callar.
De echarse en la arena de la plaza
como un toro atravesado
cansado de pelear.
De repente dan ganas de ser telépata
y no autómata.
Papalote y no bandera.
En fin,
que vaya este escrito a donde le dé la gana ir.
Por que yo sé muy bien
que a ella no llegará.
En fin…
¡Y que más da!
Es mejor hacerse a un lado entre dos que se aman
y bendecir su amor
e irse a la chingada.
Es mejor largarse y reinventarse.
Dejarte crecer el bigote y la barba.
Hacerte un tatuaje
que le miente la madre al mundo entero.
Y llenar de globos y caramelos
al primer niño hambriento de amor
que se te acerque.
Renegar de tu padre
aunque con el tiempo
te das cuenta
que cada vez más te le pareces.
En fin…
Yo quisiera que todo esto nadie lo leyera,
que fuera solamente para ella.
Pero también sé
que al final
medio mundo lo leerá.
Menos sus ojos
menos su mente,
nunca su pensar.
Yo quisiera que estas letras
llevaran inmersas un beso
que le besara sus labios del rostro
y los del sexo.
Pero ella insiste en ignorar.
Duele hacerse el fuerte y decir que…
“los hombres duros nunca lloran”.
Pero eso es sólo hasta llegar a casa
y estar a oscuras
y a solas.
¡OK muy bien, ya me largo…!
Sólo permítanme decir:
¡Bendito sea pues, el amor
en todas sus facetas
y en todos sus milagros!
El del pájaro a su hembra
el de Adán a Eva
el del hombre al sol
el de Dios a vos
el de la bandera
el de la canción.
El de la novia buena
o la infiel
que antes durante y después de ti
le abrió su pierna a cien.
Y el de la ramera,
que lo hace por amor a sus hijos
y para poder comer.
Bendito sea el amor de ella hacia él.
Y el de él…
Si,
¿por que no?
También.
Vaya pues dedicado este intento de poema
a su persona entera
aunque sé perfectamente que nunca lo leerá
y si lo llegara a hacer,
sé muy bien también,
que jamás lo entenderá.
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Última edición por Quetzalcoatl Vallejo el Miér Jun 30, 2010 8:22 pm, editado 3 veces
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