LA NOCHE ES BREVE

Vuela irresistible el aire
se enreda en tu cuello
absorve tu aroma
vuelve a mi piel,
como si fuese suspiro
desvistiendo mi alma
desnudando mi cuerpo.
Oh, amado mío,
si pudiese cubrir tu armazón
con la suave miel de mis labios.
Descubrir la trémula seda
que se apega a tu pecho
como temiendo el roce
de mis desenfrenadas manos.
Atesorar en mi ser, tu respiro
encadenarme a tu cintura
cabalgar toda la noche
sobre tu gallardía.
Dar oidos prestos
a cada gemido
que escape de tus labios.
Oh, amado mío,
la noche es breve
para explorar tu cuerpo.
Celosa es, la luna
que se esconde
con premura
al ver nuestros besos
ardientes de locura.
Celosa es, la luna
que abandona el cielo
para dibujar el día.
Oh, amado mío,
corre las cortinas
engañemos el tiempo
enredate en mis piernas
hazme tuya nuevamente.
No nacerán los lirios
ni derramarán los elíxires
las ánforas de los dioses
sobre los amantes mortales,
si se acaba la noche
si abandonas mi lecho.
Aún puedes, amado mío
hacer una sinfonía
con las voces plenas
de nuestras densidades.
Que hay espacio aún
para descubrir placeres
hasta hoy, desconocidos.

claudia zarate escribió:

Es indudablemente, una expresión apasionada

Un beso

[b]¡Oh, Claudia, Claudia...! Que hermosa poesía. ¿Cómo lo haces amiga...? Un placer leer estos versos tan apasionados, sensuales y bien escritos. Abrazos, amiga.

tu musa anda enamorada, desbordada... me encanta!!!!!!!

A Recaredo, Julio y Lorena.
El amor hace desbordar
ríos de pasíon y versos.
La musa anda muy
inspirada.

[quote="claudia zarate"]Vuela irresistible el aire
se enreda en tu cuello
absorve tu aroma
vuelve a mi piel,
como si fuese suspiro
desvistiendo mi alma
desnudando mi cuerpo.
Oh, amado mío,
si pudiese cubrir tu armazón
con la suave miel de mis labios.
Descubrir la trémula seda
que se apega a tu pecho
como temiendo el roce
de mis desenfrenadas manos.
Atesorar en mi ser, tu respiro
encadenarme a tu cintura
cabalgar toda la noche
sobre tu gallardía.
Dar oidos prestos
a cada gemido
que escape de tus labios.
Oh, amado mío,
la noche es breve
para explorar tu cuerpo.
Celosa es, la luna
que se esconde
con premura
al ver nuestros besos
ardientes de locura.
Celosa es, la luna
que abandona el cielo
para dibujar el día.
Oh, amado mío,
corre las cortinas
engañemos el tiempo
enredate en mis piernas
hazme tuya nuevamente.
No nacerán los lirios
ni derramarán los elíxires
las ánforas de los dioses
sobre los amantes mortales,
si se acaba la noche
si abandonas mi lecho.
Aún puedes, amado mío
hacer una sinfonía
con las voces plenas
de nuestras densidades.
Que hay espacio aún
para descubrir placeres
hasta hoy, desconocidos.


....QUE DECIR,ESTE TU AMADO,TU PRECIPICIO,TU DESEO,MIRAMOS Y SUPIRAMOS POR TUS LINEAS
ES UN PRIVILEGIO OIR TU CANTO,..Y ÈL LA DICHA Y EL REGOSIJO DE TU POESÌA,VOZ DEL ALMA..."DIVINA CLAUDIA"...D.D.]

Una sinfonía desencadenada en el umbral del paraíso! Arde como una antorcha en la oscuridad, ó como unos ojos de plata desbordando el alba!

Fluye y fluye la inspiración apasionada... gracias por compartirla amiga.
Un abrazo.