Tu corona de viento...

Tu corona de viento…


Poesía para Edith


Tu Corona sublime, sobre testa,
promulga las estrellas que depara;
prisión de mis estelas de silencio
corona ardiente va tras tus guirnaldas…
Belleza que compara las deidades,
sofoca tu ardua pena tras las islas,
que tu cuerpo, ladeado de hermosura,
no asimila, si el Arte me procura…

Sé tan poco de ti, que el fin austero,
reverbera primero, tras tu pluma;
soy el canto del alba: desespero
si tu boca me habla, tan temprano…
Ya tus manos, oblongas, fugitivas,
me separan de nieblas, me difuman
en colores, que tus Ojos hambrientos,
suave esperan, plegarias, emociones…

Si tomaras café, a mi salud,
yo lo haría también, por tu belleza!
Y mis labios buscaran a tu bien,
Sol de Oro que resguarda gentileza…
La mañana a tus ojos se compara,
plenitud, despertando de la Aurora:
y en tu boina de bella, mi locura,
en diciembre se embate tu pintura…!

Puede mi habla sentir la boca suma,
doncellez, tu figura inalcanzable
tu sonrisa despierta perdurable,
y las llamas de oro me deslumbran…
Por tus pies, la belleza torna umbría,
el coloquio del arte amaridado:
y en tus senos de miel sino la aurora,
quitan sombras de rosas a mi Rosa…

Ooh Edith, cuánta nieve te has llevado!
Me dejaste en tu playa de locura!
Y en tu boca de risa yace clara,
cadencia en tu sonrisa bienamada!
Ooh Edith! Cuánta sal tus ojos besa!
Cuánta Luz, de tu paño boca inmensa!
Tu figura durmiente se evapora!
Y tus senos aleves me procuras!

Eres arte, dulzura que concibe,
de jazmines, fragancias, ebrias hadas!
Que tu brisa de miel, llanto no inhibe,
en tu sombra que goza mis palabras…
Eres arte, pasión que urge a la rosa,
vanguardia de tu cuerpo, enamorada!
Para dulce canción que el tiempo olvida,
pero no yo: soy mar a tu Esmeralda…!

De locura, soy Arte en el acecho:
de tu premura, asido de tu pecho.


Alejandro Rodrigo Flagel