Lírico despeño

Lírico despeño

Torcida, mi mudanza se hace floja,
por el mancebo augusto de mi traje:
otoño no le quita ningún viaje
presunto de mi amor, ó de su hoja…
Amor incita verbo cada cual
en otra lira bella que se moja,
cual la belleza enhiesta, sin igual
que tu perfume agosta, en su panoja…

Ó de su tamo vierte sueño sumo,
en otro bulle, mi contorno no exaspero
por el dosaje que amor baña, desespero,
en otra firme barca, me consumo…
Pero si tanto he cavilado hacia tu sombra,
en la que abril, no muere, ni engavilla
una paupérrima savia de amor, trilla,
que tu distancia a mi sendero, asombra…

No vuelo más que en tu apostura,
y mi tenor imparte hondas clavijas,
que a despecho del mar, su amor prohíjas
con el enclave taciturno, en tu figura…
Ó rima el mar, ola tras ola, igual a igual
a tu figura el ritmo crepitante,
por el arpegio de mi amor, ó por mi mal
se vuelve claro que mi amor se hace fragante...

Ó en otra estrella, no mi canto, se adormece,
sin la cuna de tus labios, que embellecen,
ya no la histeria del columpio de tu goce,
cual la guirnalda que en tu boca no rocíen,
otra estridencia a mi fulgor, en otra sierpe:
cual candelero oculta su desmoce,
ojo tremado si el suspiro me desguace,
perfectas liras que aun embellecen su ego torpe…

Imparte luego, si el amor ya no claudica
su reverbero puede más que la fortuna:
en otra espera, cual almendro no fornica,
ó entenebrece el llanto u opaca a alguna…
…Cuando el dinero asembla su lirismo,
en otro bucle, desampara el ornamento:
vuelta su ala, mi verborrágico tormento,
escapa al labio de tu beso con cinismo…

Mi amor, prepara los confites que oro empeña,
ó de tu plata, amor, estrella, son mi dueña…