Hoy me pongo a pensar en todo lo vivido.
Soy un alma en pena y de eso ya estoy cansado.
¡Es tanto lo que he perdido
y tan poco lo que he ganado!
Aveces me imagino el mundo sin mi;
o por lo menos mi mundo.
Ese que quise fuera un palacio para ti
pero se me derrumbo en un segundo.
Yo te quise jamas podrás negarlo.
fue tan grande el amor que guarde en el alma
que aun busco la forma de apagarlo
y lucho contra mi en una guerra sin calma.
Es de hombres llorar.
Eso lo aprendí al quererte
y es de valientes volverse a parar.
Eso lo entendí al perderte...
Tal vez yo nunca te tuve, ni fuiste mía;
fue tan solo una ilusión, una dulce utopía.
Pero cada vez que intente alzarme con tu amor,
había otro que para ti era más importante.
Loco y herido por el amargo dolor dolor,
vagaba buscando consuelo este espíritu errante.
Y es que cada vez que quise llegar al cielo
Caía de lo más alto y terminaba en el infierno
negociando la salvación de mi alma.
Tarde comprendí que había una sola salida,
arrancarme el corazón y lanzarlo al vació.
Busque el camino más lejos de ti mi vida
y llegue al desierto a morir de frió.
Ahora que tu recuerdo pasa fugas
como ráfaga de viento por mi memoria.
Se que no debo volver a verte jamas.
Solo he de recordarte como una bonita historia...
Pasa el viento y se lleva tu recuerdo.
A su paso le pido
que te susurre suave al oído:
que por más;
tiempo y distancia yo jamas te olvido.
Soy un alma en pena y de eso ya estoy cansado.
¡Es tanto lo que he perdido
y tan poco lo que he ganado!
Aveces me imagino el mundo sin mi;
o por lo menos mi mundo.
Ese que quise fuera un palacio para ti
pero se me derrumbo en un segundo.
Yo te quise jamas podrás negarlo.
fue tan grande el amor que guarde en el alma
que aun busco la forma de apagarlo
y lucho contra mi en una guerra sin calma.
Es de hombres llorar.
Eso lo aprendí al quererte
y es de valientes volverse a parar.
Eso lo entendí al perderte...
Tal vez yo nunca te tuve, ni fuiste mía;
fue tan solo una ilusión, una dulce utopía.
Pero cada vez que intente alzarme con tu amor,
había otro que para ti era más importante.
Loco y herido por el amargo dolor dolor,
vagaba buscando consuelo este espíritu errante.
Y es que cada vez que quise llegar al cielo
Caía de lo más alto y terminaba en el infierno
negociando la salvación de mi alma.
Tarde comprendí que había una sola salida,
arrancarme el corazón y lanzarlo al vació.
Busque el camino más lejos de ti mi vida
y llegue al desierto a morir de frió.
Ahora que tu recuerdo pasa fugas
como ráfaga de viento por mi memoria.
Se que no debo volver a verte jamas.
Solo he de recordarte como una bonita historia...
Pasa el viento y se lleva tu recuerdo.
A su paso le pido
que te susurre suave al oído:
que por más;
tiempo y distancia yo jamas te olvido.
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