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por Oscar64 Dom Sep 30, 2012 9:42 pmPregón del resignado
No me hablen del resignado,
lo conocí, soy yo mismo,
me he encogido frente al sismo,
me incliné frente al tornado.
Ya de luchar he dejado,
ya del vivir me persigno,
si bien fue el dolor mi signo,
en su contra pierdo el norte
y así, ante el mal y su corte,
simplemente me resigno.
Cuantas veces dije basta,
mañana lo cambio todo,
pero no pude en el lodo
cambiar ni nombre ni casta.
Cuántas veces se me gasta
la piel de querer negarme
a rendirme, a postergarme,
a decirle a todo adiós,
si casi quedé sin voz
al tener que resignarme.
Así le pasó a millones
sin trabajo, sin vivienda,
sin crédito en tanta tienda,
sin más que mirar abajo.
Como yo buscan atajo
hasta que pierden la calma,
se apaga el faro del alma,
prosiguen por proseguir
y se acaba el perseguir
de la justicia la palma.
Por cierto no son portada,
ni dato de las encuestas,
los mandos hablan de fiestas,
los siervos ya no hablan nada.
Gigantesca es la manada
que se adormece en el tema,
ya la vida no es problema,
hay que hundirse y no esperar,
perdonen mi despertar
y de este ocaso el poema.
Mejor me vuelvo a dormir,
la anestesia es buena cosa,
niega la espina en la rosa
aunque sangre hasta morir.
Resignado he de seguir,
de nadie ya nada quiero,
mañana vendrá el banquero
tras su préstamo de huesos,
yo, que no creo en regresos,
me resigno aquí y lo espero.
http://fuerteyfeliz.bligoo.cl/
28 09 12
No me hablen del resignado,
lo conocí, soy yo mismo,
me he encogido frente al sismo,
me incliné frente al tornado.
Ya de luchar he dejado,
ya del vivir me persigno,
si bien fue el dolor mi signo,
en su contra pierdo el norte
y así, ante el mal y su corte,
simplemente me resigno.
Cuantas veces dije basta,
mañana lo cambio todo,
pero no pude en el lodo
cambiar ni nombre ni casta.
Cuántas veces se me gasta
la piel de querer negarme
a rendirme, a postergarme,
a decirle a todo adiós,
si casi quedé sin voz
al tener que resignarme.
Así le pasó a millones
sin trabajo, sin vivienda,
sin crédito en tanta tienda,
sin más que mirar abajo.
Como yo buscan atajo
hasta que pierden la calma,
se apaga el faro del alma,
prosiguen por proseguir
y se acaba el perseguir
de la justicia la palma.
Por cierto no son portada,
ni dato de las encuestas,
los mandos hablan de fiestas,
los siervos ya no hablan nada.
Gigantesca es la manada
que se adormece en el tema,
ya la vida no es problema,
hay que hundirse y no esperar,
perdonen mi despertar
y de este ocaso el poema.
Mejor me vuelvo a dormir,
la anestesia es buena cosa,
niega la espina en la rosa
aunque sangre hasta morir.
Resignado he de seguir,
de nadie ya nada quiero,
mañana vendrá el banquero
tras su préstamo de huesos,
yo, que no creo en regresos,
me resigno aquí y lo espero.
http://fuerteyfeliz.bligoo.cl/
28 09 12
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