Entre las sombras

Entre las sombras, un diamante
yace contigo en un instante,
y entre oscuro y vago el sol desierto,
brumas apenas süeñan el acierto…
Cavilando la luz, distinta de entre el musgo
otea calidez la lluvia en desamparo,
y en su jovial llanura la medida de su faro
aclara en la mudez que asombra flor del sesgo…

Distancia al ruiseñor, campana sin sosiego
ranura desigual que esconde la promesa
del verano en la sombra púrpura belleza
jacinto azul disperso entre la bóveda que ciego...
Jazmín, que en la marea vespertina de su beso
incauta oro reclama y cunde cual velamen
en plata de la mar desnuda, tïerno numen
escuadra a su sigilo la lluvia de mi seso.

Otëa el garabato que espuma en la Victoria
paciente ruiseñor que encumbra en la maleza,
aseado de un bribón que aclara y que embelesa
su diurna prïsión de claves, su memoria…
Arreaba la función que esculpe en la realeza
la suma trilogía del verso cual espada
Diana arde en sus Castalias de oro cual amada
y mi amada se celebra cual fruta de belleza…

A su redil engaño no es entre las rosas
la mística pasión que niega una mañana
abrir una ventana cuando el sol envuelve rosas
los jazmines de tu voz y acaudala sombra vana…
Arropado en el sabor de los labios de tus flores
maculadas por las arpas y destiles rojos süeños,
frenesíes de descalzos aromas, piel ó dueños
de silbar frente a tu pena la prisión de los dolores…

Jala de mi brazo, arquea tu columna,
brava desigual, que un arcángel, tú, Paloma
que de tu pureza vital ya tu blancura asoma
y engendra en vitales ramas las flores de tu premura…
La risa de tu virtud alaba la Vid de tu sol diamante,
jovial entre el seno de las flores, sus atributos,
gallarda en el pan preciso para tu boca
que bebe del alba el agua de la que nace…

Pimpollo, eres Pimpollo, tan joven que no me juzga,
y enmienda heridas, de tus caricias soy el que lleva
en mi canasta, hasta que llueva, de tu verano
tu mansa mano sobre mis ojos (te ven sencilla)…
Y si la nieve me oyera, de tu palabra
el beso diera para el frío templar,
y aún besar el jazmín puro, que al despertar
tu sueño amara y en ti confiara, mi suspirar…

Si hay sombras luminosas tú las descubres poeta, y si no las hay tú las creas, mi admiración para tus versos, grande, compañero!!!

Y si la nieve me oyera, de tu palabra
el beso diera para el frío templar,
y aún besar el jazmín puro, que al despertar
tu sueño amara y en ti confiara, mi suspirar…

Una coda fantástica, un placer leerte compañero.

Besos
Carmen

Muchas gracias, Óscar!!!!!

Muchas gracias, Carmencita!!!!!!

Un abrazo enorme para tooodos!!!!!

HUURRA A LOS POETAS Y POETISAS!!!!!! HIP, HIP, HURRA!!!!! HIP, HIP, HURRA!!!!

VIVA LA POESÍA!!!!! VIVA EL TEATRO!!!!! VIVA EL AMOR!!!!!

UN ABRAZO GRAAANDE!!!!!