LA LLUVIA Y EL PASTO

Sentada en la galeria de mi casa,
sola, en silencio,
contemplo la lluvia,
el cielo esta llorando,
las gotas suaves, persistentes
mojan el pasto y las flores.
De la tierra sale ese aroma
ùnico, especial, diferente, inigualable
que exhala el pasto mojado.
Esa fragancia...
es la misma que me cautivaba en mi niñez.

Hay perfume màs particular y grato que el del pasto mojado?
Creo que no, es ùnico,
no tiene quien compita con èl.

Cierro los ojos
y me traslado a muchos, muchos años atràs
cuando esperaba los dìas de lluvia
para chapalear en los charcos de agua
de mi calle de tierra, sin asfaltar.

Que feliz me sentìa,
pisaba, saltaba,bailaba,
me embarraba de la cabeza a los pies.
Levantaba la vista al cielo
mojada mi cara, mi ropa
y agradecia ese momento
como si recibiera agua sagrada.

Claro, mi mamà no pensaba lo mismo,
me retaba cuando llegaba a casa,
sucia, mojada, enlodada
con una sonrisa que cubria toda mi cara.
Pero interiormente decia...
quien me saca lo bailado.
Una reprimenda no podìa diezmar
la felicidad que habìa vivido, gozado.
El regocijo de que el cielo
haya derramado sus làgrimas
para mi deleite.

BETT
22-01-12

beatriz irene bardeci escribió:Sentada en la galeria de mi casa,
sola, en silencio,
contemplo la lluvia,
el cielo esta llorando,
las gotas suaves, persistentes
mojan el pasto y las flores.
De la tierra sale ese aroma
ùnico, especial, diferente, inigualable
que exhala el pasto mojado.
Esa fragancia...
es la misma que me cautivaba en mi niñez.

Hay perfume màs particular y grato que el del pasto mojado?
Creo que no, es ùnico,
no tiene quien compita con èl.

Cierro los ojos
y me traslado a muchos, muchos años atràs
cuando esperaba los dìas de lluvia
para chapalear en los charcos de agua
de mi calle de tierra, sin asfaltar.

Que feliz me sentìa,
pisaba, saltaba,bailaba,
me embarraba de la cabeza a los pies.
Levantaba la vista al cielo
mojada mi cara, mi ropa
y agradecia ese momento
como si recibiera agua sagrada.

Claro, mi mamà no pensaba lo mismo,
me retaba cuando llegaba a casa,
sucia, mojada, enlodada
con una sonrisa que cubria toda mi cara.
Pero interiormente decia...
quien me saca lo bailado.
Una reprimenda no podìa diezmar
la felicidad que habìa vivido, gozado.
El regocijo de que el cielo
haya derramado sus làgrimas
para mi deleite.

BETT
22-01-12

Gratos recuerdos de la niñez que no hay que olvidar, porque la lluvia que nos dá el Todopoderoso es fuente de vida y alegría. Eso nos convence más de Dios y su existencia. Un grato placer leerte.

Muchas gracias a vos amigo Amoreno por pasar por mis recuerdos. Besos BETT

En todo tiempo la lluvia fue y será una bendición.
Beso y gracias por compartir este recuerdo.

Ver caer la lluvia mirando alegremente un cielo que se sabe lleno de lágrimas que bañarán nuestros cuerpos,y dejar caer los brazos inertes mientras recibimos la caricia divina, un goce que solo se recibe en la niñez. Abrazos amiga.

Gracias amigos Marcelo y Kin por lo expresado. Un beso BETT

Precioso poema, Bett, eternizando recuerdos de la niñez.
Fue muy grato leerlo.

Gracias por compartir.

Gracias querida Delia, cuando la niñez fuè buena, sòlo te trae buenos recuerdos. Por eso comprendo a quien no ha tenido la dicha de una bella niñez. m