Palabra Muda

Balancearé mi dolor helado bajo las nubes,
como la tierra siempre en el viaje eterno
llegaré al mar,
al cielo coloreado,
y en una vuelta del sol,
me iré.

¿Voy, donde? No sé,
arrastro mi fe perdida y mi esperanza,
por esta razón grito,
y en el infierno de mi deseo ardiente,
mi corazón cree en el aplauso del fuego del recuerdo
y en la época fría del túmulo en el campo.

¿Y entonces,
es realmente mi locura apasionada,
la oscuridad desesperada de los
muertos con el dolor
de besarse sin labios
en el insomnio de una boca
que bebe cantado los sueños sin abrazos
bajo el cielo?.

Las lluvias arrecian el vuelo,
las danzas y él cantar,
sigo el cauce del río,
y la tormenta que en mi cerebro gira,
arando el firmamento
y cosechando en el viento.

Canta la voz de un ángel
presente a veces en mí,
el eco del pasado muere en mi memoria:
¿Por qué deseamos ardientemente
este abismo de pensarnos
si la mitad de la existencia
es una palabra muda?

En el río el cadáver
y la tristeza impotente
de las mariposas de la noche,
sería simple ahora destruirnos lentamente.

Sigue el cauce del rio no hay pérdida, llegarás al mar, seguro.

Un saludo Luis, un placer leerte.