NOTA: El caminaba por un sendero rodeado de espinillos, curvas cerradas dificultando la visión de Etra(el caminante), ya que no poseía una estatura considerable.
Etra camino,camino, y siguió caminando. Llegando al atardecer, vio que el bosque serrano disminuía su espesor; mas adelante encontró un puerta inmensa rodeada de una fornida pirca, al cursarla quedo pasmado al ver a ese bosque tupido de espinas sustituido por arboles llamados sina-sina y enormes eucaliptos, un paseo dominado por la enredadera madre selva.
Guiado por el dulce aroma de las flores y perdido en el color rojizo que las hojas tomaron con la puesta del sol avanzó hasta llegar a la casa situada en medio de la propiedad.
Jala de una soga que correspondía a pequeña pero aguda campana, al instante se ilumino la solitaria casa. Se escuchan pasos, y, al detenerse, suena una vos seca y lugubre: - ¿Quien llamo?
-Soy Etra, trabajo para la editorial el "poeta guerrero". Si podría ayudarme con su biografía, para acoplarla con su ultimo libro.
Se abre la puerta, se asoma una persona joven, quizá 25 años, del cual se escucha una voz amable y cálida: Tranquilo, no hay problema. Fin de la NOTA
¿Mi vida? ¿que te puedo decir?, de mi vida pasada solo tengo recuerdos muy difusos, no se si te voy a servir lo que te cuente. Me duele la cabeza cuando hablo de esto, pero intentaré recordar todo lo posible...
Para dejar claras algunas cosas, me llamo Persek G´shion, actualmente poseo 27 años de edad.
Veamos, lo mas antiguo que registro fue previo a mi inicio escolar, disfrutaba jugar y pasar la tarde con mis primos, ya que mi padre se ausentaba la mayor parte del tiempo, y mi madre me retaba y castigaba, aveces me pegaba; curiosamente, nunca supe porque estaba tan nerviosa, tal vez por que no alcanzaba el dinero, o por miedo de algo. Siendo franco, desde ese entonce empece a sentir mucha apatía, y odiaba el tiempo compartido en ese lugar.
Luego nació mi hermana, al principio le tuve gran aprecio, ya que yo había pedido su nacimiento, pero todo acabo cuando comenzó a acaparar toda la atención de mis padres. No se, ya sea por ser la mas pequeña, o delicada, o por el simple hecho de ser LO NUEVO.
Seguro piensas que es normal tener celos, clásico por la edad tal vez, pero no termino allí. Competí contra ella, y aunque siempre me derroto, no me di por vencido, mis días giraban en torno a ella.
El tiempo no paro y entre al sistema educativo, mi primer semana en el jardín de niños fue increíble, conocí a compañeros, hice amigos, etc. Pero mi utopía tenia los días contados, pronto todo volvió tristemente a la normalidad.
El tiempo no perdona, y mi estancia en ese jardín fue efímera, comencé la primaria, con ello mi primer amor; así empecé a separarme de mi casa. Pasaron años y nos detenemos en tercer grado, ella entro en la primaria, y yo debía ser su ejemplo, no pude hacer muchas cosas, me volvió a arruinar la vida. No dejaría que me venza sin luchar, por respeto a mi orgullo combatí de la forma mas directa: era el mas grande de mi grado, me volví tosco, peleador y por ende mi conducta descendió. Las peleas se hicieron muy frecuentes me mi vida diaria. Llame gravemente la atención así. Pero en cuarto grado, desapareció todo lo logrado, poco a poco los sentimientos se ahondaron en mi ser y empezaron a tener repercusiones.
CONTINUARÁ...(no lo termino de escribir ahora xq tengo q ir a dormir)
Etra camino,camino, y siguió caminando. Llegando al atardecer, vio que el bosque serrano disminuía su espesor; mas adelante encontró un puerta inmensa rodeada de una fornida pirca, al cursarla quedo pasmado al ver a ese bosque tupido de espinas sustituido por arboles llamados sina-sina y enormes eucaliptos, un paseo dominado por la enredadera madre selva.
Guiado por el dulce aroma de las flores y perdido en el color rojizo que las hojas tomaron con la puesta del sol avanzó hasta llegar a la casa situada en medio de la propiedad.
Jala de una soga que correspondía a pequeña pero aguda campana, al instante se ilumino la solitaria casa. Se escuchan pasos, y, al detenerse, suena una vos seca y lugubre: - ¿Quien llamo?
-Soy Etra, trabajo para la editorial el "poeta guerrero". Si podría ayudarme con su biografía, para acoplarla con su ultimo libro.
Se abre la puerta, se asoma una persona joven, quizá 25 años, del cual se escucha una voz amable y cálida: Tranquilo, no hay problema. Fin de la NOTA
¿Mi vida? ¿que te puedo decir?, de mi vida pasada solo tengo recuerdos muy difusos, no se si te voy a servir lo que te cuente. Me duele la cabeza cuando hablo de esto, pero intentaré recordar todo lo posible...
Para dejar claras algunas cosas, me llamo Persek G´shion, actualmente poseo 27 años de edad.
Veamos, lo mas antiguo que registro fue previo a mi inicio escolar, disfrutaba jugar y pasar la tarde con mis primos, ya que mi padre se ausentaba la mayor parte del tiempo, y mi madre me retaba y castigaba, aveces me pegaba; curiosamente, nunca supe porque estaba tan nerviosa, tal vez por que no alcanzaba el dinero, o por miedo de algo. Siendo franco, desde ese entonce empece a sentir mucha apatía, y odiaba el tiempo compartido en ese lugar.
Luego nació mi hermana, al principio le tuve gran aprecio, ya que yo había pedido su nacimiento, pero todo acabo cuando comenzó a acaparar toda la atención de mis padres. No se, ya sea por ser la mas pequeña, o delicada, o por el simple hecho de ser LO NUEVO.
Seguro piensas que es normal tener celos, clásico por la edad tal vez, pero no termino allí. Competí contra ella, y aunque siempre me derroto, no me di por vencido, mis días giraban en torno a ella.
El tiempo no paro y entre al sistema educativo, mi primer semana en el jardín de niños fue increíble, conocí a compañeros, hice amigos, etc. Pero mi utopía tenia los días contados, pronto todo volvió tristemente a la normalidad.
El tiempo no perdona, y mi estancia en ese jardín fue efímera, comencé la primaria, con ello mi primer amor; así empecé a separarme de mi casa. Pasaron años y nos detenemos en tercer grado, ella entro en la primaria, y yo debía ser su ejemplo, no pude hacer muchas cosas, me volvió a arruinar la vida. No dejaría que me venza sin luchar, por respeto a mi orgullo combatí de la forma mas directa: era el mas grande de mi grado, me volví tosco, peleador y por ende mi conducta descendió. Las peleas se hicieron muy frecuentes me mi vida diaria. Llame gravemente la atención así. Pero en cuarto grado, desapareció todo lo logrado, poco a poco los sentimientos se ahondaron en mi ser y empezaron a tener repercusiones.
CONTINUARÁ...(no lo termino de escribir ahora xq tengo q ir a dormir)
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