Doblego el arte

Doblego el arte

Doblego el arte de mi sombra entre la risa,
para vestir la llamarada de querubes
donde lo bello se comporta como brisa,
y entre los vuelos, anonada ver que subes…
Mi palio me desnuda entre la fiebre,
de la desnuda continencia voluntaria
de sólo ardor, ya la epopeya funeraria
de mi destello, en otro sol, en otra liebre…

Me busca un sello que elucubra mocedades
entre la siembra de mi rota verde mella,
sobre lo vacuo entona casi sin querella
mi boca unísona, caliginosa evades…
Mi risa siembra en tu alma libertades
con nacimiento de mi rosa, de mis ansias,
entre tus nieves son ardor, protuberancias,
las costas de la flor, de tu amor, tardes…

Mi boca avasalla con suspiros sin iguales,
la rosa incierta de tu mano en el crepúsculo
donde se antela mi fragor, mis risas tales,
que mi batalla hasta tu flor, es sol minúsculo…
Ya verdea la cumbre de tu laja,
entre la cera, mi diamante te defiende
de la clemátide de luz, que el alba cuaja,
en lo sombrío que me late, y me desprende…

Mi amor por ti, es una estrella que camina
entre vergeles, entre soles, se aglutina
con rostros, mantos de albor, ó casi sella
su amor fragante en el amor, en otra estrella…
Me robo un ápice de luna, de llamado
de doble cara, mi emoción, mi robo ágil,
sobre la estrella de mi voz, mi risa, prado
en la fragancia de tu amor, de tu redil…

Mi boca asesta del coturno que difiere,
entre tus loas, pertenece mi llamado
como casi un sol da vista, enamorado,
entre la bruma acierta luz, y muere…
Mi risa es vientre de la luz, es sol que enferma,
de la vendimia de tus flores, de tu ágata
sobre la cierta boca frágil que me mata
y me da goces en el habla, no me ayerma…

De ti mi boca, puede hablar con sólo darme
en el centro a mi poesía, no contuve
de la fiesta de tu sombra, que retuve,
entre las algas de tu flor, buscas amarme…
Mi beso no declara fantasías,
ó lo fantástico no muere en agonías,
muere primero mi destino entre tus bucles,
tu risa empero, es más fantástica, debacles!

Mi amor fingía entre tus rosas, no en tu boca,
mi risa muere si no vive en tu flor loca…