Angustia que condena

Es esta angustia que llevo

en mis adentros, marcando a cada paso

un loco sentimiento.

Ven amor mío, hasta mi fuego nuevo,

sublima mis intentos

por no morir sin sueños.

No ves en mi mirada

la congoja que me siembran

tus mentiras de alto vuelo.

Ya vivir no quiero...

Soy una pobre solitaria

sin tu amor y sin tus besos.

Vanos intentos...

Al verte en tus miserias

me deshojo con el viento,

como esa rosa esparcida

en el camino, entre las piedras

rodando sin consuelo.

Esta angustia es sólo mía y tu condena,

eso lo sé...

Caerás arrepentido, bajo una rosa

acariciada por la brisa

en otra primavera esplendorosa,

escucharás mi risa.

Te llevarás la angustia y el agravio

junto con mi olvido.


Matilde Maisonnave