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por Oleaje en tu dulzor, la mar embarga
cual sutil quebranto de la noche
ó ciega su murmullo de fantoche
su loca esgrima, el oleaje carga…
Desnudez su misma flor encauza en el abrigo
sü presuroso hálito que fuera en acechanza
sü loco sueño que alcanza su mudanza
en el solsticio que madura hasta que sigo…
Y en la noche vespertinos cantos süeñan
la voluntad que se mece entre mis brazos
y el celado llanto del caudal de mis abrazos
zumba en la huella del oído, aires que preñan
y el indómito canto a su lunar que avanza
llameando del cristal su azul prestanza
en el sosiego amago de sutil arquitectura
por el declive de su llanto, el alma pura
Que sofrena y que mitiga mis amagues
de solo aliento y sufridas fauces
que denotan el oxígeno que vuelve hacia la espera
de su juglar, a su dormida Primavera…
Para el paciente mar que desventura
el loco ardor que en su música figura
entreveo sü silueta ufana cumbre bella,
en el sosiego amague es casi loca estrella
Que a mi resguardo, en fortaleza, no sucumbo
cual admirar las músicas del rumbo
que nacen ciegas y al oeste sofrenadas
canto de admirar lunas pasadas…
Y entre que silba y puebla tu mirada,
hasta el caudal que su céfiro lo baña
admira el esplendor de su ciega cabaña,
a su inmortal poeta, enamorado, enamorada…
Y en el sigilo que puebla errante su finura
alienta el mísero balido entre sus cercas
cual solo errante sulfuro de sus diestras
admira en su semblante la pasión de tu cultura!
Y al vestigio de la sal, océano simiente
caudaloso eco del frenesí cual muda gota
océano no pierde, ni luce, ni brota
cual capullo ameno, su sílaba desmiente
El sólo frenesí de su álgida marea
que sobre el ala de la tea
galana no se inunda, ni se puebla su bermejo
océano de espejo,
que en su bóveda celeste el lustro de su amada
es sólo la mirada
de un alba que despeja
la sal que la entreteja,
A sus silbados astros, cual marea del orfebre
lúdica artista pueble, la flor que te celebre…
cual sutil quebranto de la noche
ó ciega su murmullo de fantoche
su loca esgrima, el oleaje carga…
Desnudez su misma flor encauza en el abrigo
sü presuroso hálito que fuera en acechanza
sü loco sueño que alcanza su mudanza
en el solsticio que madura hasta que sigo…
Y en la noche vespertinos cantos süeñan
la voluntad que se mece entre mis brazos
y el celado llanto del caudal de mis abrazos
zumba en la huella del oído, aires que preñan
y el indómito canto a su lunar que avanza
llameando del cristal su azul prestanza
en el sosiego amago de sutil arquitectura
por el declive de su llanto, el alma pura
Que sofrena y que mitiga mis amagues
de solo aliento y sufridas fauces
que denotan el oxígeno que vuelve hacia la espera
de su juglar, a su dormida Primavera…
Para el paciente mar que desventura
el loco ardor que en su música figura
entreveo sü silueta ufana cumbre bella,
en el sosiego amague es casi loca estrella
Que a mi resguardo, en fortaleza, no sucumbo
cual admirar las músicas del rumbo
que nacen ciegas y al oeste sofrenadas
canto de admirar lunas pasadas…
Y entre que silba y puebla tu mirada,
hasta el caudal que su céfiro lo baña
admira el esplendor de su ciega cabaña,
a su inmortal poeta, enamorado, enamorada…
Y en el sigilo que puebla errante su finura
alienta el mísero balido entre sus cercas
cual solo errante sulfuro de sus diestras
admira en su semblante la pasión de tu cultura!
Y al vestigio de la sal, océano simiente
caudaloso eco del frenesí cual muda gota
océano no pierde, ni luce, ni brota
cual capullo ameno, su sílaba desmiente
El sólo frenesí de su álgida marea
que sobre el ala de la tea
galana no se inunda, ni se puebla su bermejo
océano de espejo,
que en su bóveda celeste el lustro de su amada
es sólo la mirada
de un alba que despeja
la sal que la entreteja,
A sus silbados astros, cual marea del orfebre
lúdica artista pueble, la flor que te celebre…
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