La vieja carta a Max

La vieja carta a Max

Sin saber, sin razón y a la vez sin dudar,
te escribo, Max, del ajetreo en el torrente,
sólo para decir cuánto doy gracias por el puente
que hasta aquí entretejen dos voluntades y un azar.

Nada se sabe, Max, del mundo o de nosotros,
de las horas de sombra o de la luz esplendente,
pero ante estas miserias alta ha de ir la frente
y los ojos acendrados y la fe puesta en los otros.

Por eso, Max, saludos y pido que acompañe
el mar, la miel, la luna todas tus empresas,
y que la boca que ames sea la que besas
y que la que te ofende de verdad nunca te dañe.

Que a tus labios nunca los calle tanto olvido.
Una estrella, un abrazo, una hoguera te entrego,
si esas rosas son tuyas tu oficio sea el riego,
compartirlas con todos, eso es cuanto te pido.

18 12 10

buena carta....
buenos versos ....
buenas rimas....
super saludos.....