Miedo sombrío

Miedo sombrío

Alas, olas, fuego enceguecido,
todo dejó al partir su indumentaria:
un perfume la estrella,
un rastro cada beso en las arenas de tu alma
y un silbido después de los silencios de la muerte.
Sólo nosotros, errantes tabla a tabla,
de la cuna hasta la tumba, niños perdidos
en el juguete de la aurora, viento
volado en los balcones del ocaso,
sólo nosotros, digo, de no atrevernos nunca,
ni olvido sembraremos en la humedad de las aceras
ni el pájaro ni el árbol prometidos
ni la hoguera que pide a gritos nuestras voces
para ser llamarada en las noches de este sueño.

05 06 10

[b]Buenísimo este poema, amigo Óscar. En él dejas cada cosa en su lugar, flotando en el vació de su sueño. Magnífico. Abrazos, poeta.

el miedo... paralizante, borrador de sueños que si hubieran sido alcanzados... la vida sería otra cosa... muy bueno, muy bueno, como todo lo que escribes... amigo!