Sin más palabras
Amado mío, ¿y cuándo
sabrán de estos amores nuestras gentes,
no sólo los que pasan, los ausentes,
sino los que a este lado han persistido,
los padres, la familia, aquellos hijos
que nos dio un tiempo atrás la vida nuestra
y que sin saber nosotros que estaríamos
aquí, juntos y amándonos, nos siguen?
Lo digo sin más prisa que el labriego
que sabe para el fruto el tiempo justo,
lo digo sin unción ni más urgencia
que no negar la luz al que la habita.
El tiempo no pasó, lo sé, del juicio,
del juez que en bacanal come a sus dioses
y luego lanza al fuego a los que apartan
su pie de aquel festín por ir en calma.
Yo te amo y te amaré, tú me encontraste,
no hay nada nuevo al sol, sólo dos hombres
que tanto se han odiado que entendieron
que no pueden vivir si no se besan.
Dudaste y yo dudé, ambos huimos
del fuego abrasador, de más de un fuego,
probamos en mil carnes de este goce,
pero no sólo era placer lo que buscamos.
Entonces de una vez lo comprendimos,
que juntos estaríamos y a cargo
de un tiempo por vivir entre batallas,
de una mano en la otra mientras se unen
nuestros cuerpos en las almas de un abrazo.
Amado mío, ¿cuándo, o te parece
que aquí, tras preguntarlo, ya es lo mismo,
que es claro que en nosotros lo que importa
es nuestro amor, y que el que bien nos quiere
así lo entenderá, sin más palabras?
http://fuerteyfeliz.bligoo.cl/
15 12 13
Amado mío, ¿y cuándo
sabrán de estos amores nuestras gentes,
no sólo los que pasan, los ausentes,
sino los que a este lado han persistido,
los padres, la familia, aquellos hijos
que nos dio un tiempo atrás la vida nuestra
y que sin saber nosotros que estaríamos
aquí, juntos y amándonos, nos siguen?
Lo digo sin más prisa que el labriego
que sabe para el fruto el tiempo justo,
lo digo sin unción ni más urgencia
que no negar la luz al que la habita.
El tiempo no pasó, lo sé, del juicio,
del juez que en bacanal come a sus dioses
y luego lanza al fuego a los que apartan
su pie de aquel festín por ir en calma.
Yo te amo y te amaré, tú me encontraste,
no hay nada nuevo al sol, sólo dos hombres
que tanto se han odiado que entendieron
que no pueden vivir si no se besan.
Dudaste y yo dudé, ambos huimos
del fuego abrasador, de más de un fuego,
probamos en mil carnes de este goce,
pero no sólo era placer lo que buscamos.
Entonces de una vez lo comprendimos,
que juntos estaríamos y a cargo
de un tiempo por vivir entre batallas,
de una mano en la otra mientras se unen
nuestros cuerpos en las almas de un abrazo.
Amado mío, ¿cuándo, o te parece
que aquí, tras preguntarlo, ya es lo mismo,
que es claro que en nosotros lo que importa
es nuestro amor, y que el que bien nos quiere
así lo entenderá, sin más palabras?
http://fuerteyfeliz.bligoo.cl/
15 12 13
Ayer a las 4:18 pm por eledendo
» Ahelos
Ayer a las 1:41 pm por Victor Rafael
» Mañana cuándo me haya ido
Sáb Ene 25, 2025 1:53 pm por jorge enrique mantilla
» Me llegó la vejez
Vie Ene 24, 2025 9:42 am por jorge enrique mantilla
» La soledad de mi alma
Miér Ene 22, 2025 7:07 am por jorge enrique mantilla
» Los Sabios de Oriente
Miér Ene 15, 2025 3:23 am por caminandobajolalluvia
» MUERTE DEL SILENCIO [Dedicado a García Lorca y seguidores]
Miér Ene 15, 2025 3:07 am por caminandobajolalluvia
» EN TU AMOR
Jue Dic 12, 2024 2:17 pm por eledendo
» MERCADERES DEL TEMPLO
Jue Nov 14, 2024 4:55 am por caminandobajolalluvia