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Conectarse
por macgregor Vie Ene 04, 2013 2:00 pmVero, en tu cuerpo están las palabras
donde descansa el fruto
que tu hombre se comerá
salvajemente y bruto.
Tu respiraras alto y profundo
mientras te ato y desato
como un ángel vagabundo
Porque contigo hacer el amor
es conocer un poco mas el mundo
que algunos llaman el paraíso
y donde Adán con Eva anduvo
Vero, es tu cuerpo mi riqueza
son esos senos rosado mi gran lujo
en tu vagina es donde mi lengua versa
las flores y los cometas
el arco iris y las centellas
el fuego con que me anega
Cuando cierras los ojos
mis ojos inventan fantasías,
de tal que en ti desbordo mi enojo
que luego se convierten en tu alegría
Me invades con los mejores calores
es tu clima que me desespera
por eso no te escucho cuando me dices: espera
¡Es muy tarde! Me deslizo por tu piel de fragante olores
que al subir al cielo, son mi soporte, mi escalera.
En una aceleración de ritmo
se pronuncian tus gemidos que murmuran mi todo
cálida y tibia la humedad de tus labios
y tu lengua aproximándose en busca del sabor
del gran liquido que solo te da tu hombre
II
Sin embargo antes, habré asaltado
tu sonriente cuerpo
latigandote como soldado,
encadenada como esclavo,
mientras pasa el tiempo
de tus gritos y de tus convulsionados orgasmos,
que son rimas y bellas melodías
que a mi me dan entusiasmo.
III
Me gozo cuando sufres, como sufrió Jesucristo
cuando cargas mi cruz y te libro de tus pecados.
En cada rincón de tu templo, una huella habré marcado,
de tal manera que rojo te veras
aunque sangre no hallas derramado.
No te resistes de probar mis perlas
te ves mas hermosa cuando están en tus labios
cuando caen entre tus pecho
y con tu lengua la enfrías,
y lo tragas despacio.
Al final de todo
tu y yo no somos tan extraños,
sabe Dios que jugamos
a lo que él nos dio como regalo.
El deseo de unirnos en carne,
un acto de amor y humano.
Al final de todo
pasaste por mi fundición
Y estás hecha de Oro,
suave como la manzana,
envenenándonos hasta las entrañas.
03-01-2013
Entre las 00:00 – 00:30
donde descansa el fruto
que tu hombre se comerá
salvajemente y bruto.
Tu respiraras alto y profundo
mientras te ato y desato
como un ángel vagabundo
Porque contigo hacer el amor
es conocer un poco mas el mundo
que algunos llaman el paraíso
y donde Adán con Eva anduvo
Vero, es tu cuerpo mi riqueza
son esos senos rosado mi gran lujo
en tu vagina es donde mi lengua versa
las flores y los cometas
el arco iris y las centellas
el fuego con que me anega
Cuando cierras los ojos
mis ojos inventan fantasías,
de tal que en ti desbordo mi enojo
que luego se convierten en tu alegría
Me invades con los mejores calores
es tu clima que me desespera
por eso no te escucho cuando me dices: espera
¡Es muy tarde! Me deslizo por tu piel de fragante olores
que al subir al cielo, son mi soporte, mi escalera.
En una aceleración de ritmo
se pronuncian tus gemidos que murmuran mi todo
cálida y tibia la humedad de tus labios
y tu lengua aproximándose en busca del sabor
del gran liquido que solo te da tu hombre
II
Sin embargo antes, habré asaltado
tu sonriente cuerpo
latigandote como soldado,
encadenada como esclavo,
mientras pasa el tiempo
de tus gritos y de tus convulsionados orgasmos,
que son rimas y bellas melodías
que a mi me dan entusiasmo.
III
Me gozo cuando sufres, como sufrió Jesucristo
cuando cargas mi cruz y te libro de tus pecados.
En cada rincón de tu templo, una huella habré marcado,
de tal manera que rojo te veras
aunque sangre no hallas derramado.
No te resistes de probar mis perlas
te ves mas hermosa cuando están en tus labios
cuando caen entre tus pecho
y con tu lengua la enfrías,
y lo tragas despacio.
Al final de todo
tu y yo no somos tan extraños,
sabe Dios que jugamos
a lo que él nos dio como regalo.
El deseo de unirnos en carne,
un acto de amor y humano.
Al final de todo
pasaste por mi fundición
Y estás hecha de Oro,
suave como la manzana,
envenenándonos hasta las entrañas.
03-01-2013
Entre las 00:00 – 00:30
» Ahelos
» Mañana cuándo me haya ido
» Me llegó la vejez
» La soledad de mi alma
» Los Sabios de Oriente
» MUERTE DEL SILENCIO [Dedicado a García Lorca y seguidores]
» EN TU AMOR
» MERCADERES DEL TEMPLO