A una hormiga

A una hormiga

Dime, pero tú dime, quién te enseña
la fuerza y el tesón con que levantas
tu peso tantas veces y otras tantas
lo cargas amistosa y halagueña.

Y no estás sola pues, siendo pequeña,
hay tantas como tú que te agigantas,
que es múltiple el valor con que adelantas
tu paso por el bien de otras sin seña.

Yo quisiera saber si un dios te sueña
o tú te sueñas dios a nuestras plantas,
sabiendo cómo el hombre se despeña.

Lo cierto es que en lo heroico en mi voz cantas,
hormiga, que con tu hoja vas risueña
y así de mi altivez lo vano espantas.

12 11 10

Un ejemplo...eh??? Un buen ejemplo para el Hombre...verdad???