Sin rostro

Sin rostro

Sin rostro, de luna, pasión que vuelve antaño
ya desde la mirada, procela mar umbrío,
caduco me enajena, consciente sin el daño
en otro mar traverso que espuma no glorío,
devoto ya si el lienzo, de besos en que sufre
ignoto ya si el tiempo, en otro mar de azufre
vuelve ya si pena, el muro al mar, su alma
en otra espuma, lienzo, bajel, sondeo en calma…

Sin oro, sin esboce, ni río ni comparo
ya desde la vedada del mar en el reparo,
flagela y ya no alcanza, lo núbil de mi rosa
en otro can endeble, sumido entre mi prosa…
Ni plata, ni decoro: ni oro vuelto al daño,
espinel vacío, a horas del crepúsculo
que vuelve ya sin nada, ni pez ni un solo músculo
en otro mar si impera, vagido de mi baño…

Sin cielo, sin laureles, sin poma, sin amagues,
la sombra en el poema, es muda si reclames
el oro va si drena, suspiro no lo ames
en torno si procela, latido en otros auges…
Mirada vuelve llena, de lágrimas si, empero
en otro imán no busca, latido sin acero,
en otro mar de sombra, de luna vuelve pena
contigo, en otra bruma, yaciente de la arena…

Me mojo en el suspiro, mi cauce está de adorno,
en otro mar hendido, mi fábula si trena,
suspiro no envenena, si el goce me condena
en otro trago ciego, que vuelve sin infierno…
Mirada va si pena, sin ósculo reflota,
suspiro me condena, si el alba besa y brota
latido de mi ángel, en otro can, si abate
suspiro en otro lienzo, tu boca no me mate…

Estática, si llama, la llama de tu nombre
en otra golondrina, enciende si no esconde,
la liebre de la llama, que fuego es en el hombre,
suspiro va si pena, latido si no hay dónde…
Mirada va si el yugo, del alga, de la cresta,
tan fábula, volátil, enciende mudas aguas
en otras golondrinas, de besos y de fraguas
contigo en otro diestro, añil de mi floresta…

Tan beso va si trova, latido de mis musas,
en otro beso herido, de flores que desusas…