Adusta peña en flor

Fraguado aroma de tenor resplandeciente,
de Céfiro no emblema, transcurre en tibia gema
tu diurna helada de pantera que la mente
agolpa sobre el légamo de tu flor sobre el poema…
Adusta peña errante de su flor en dulce etéreo
cavila sonoroso su virtud de fantasía
alerce sobre bruma, quimera de buen día
aleaba sólo el viento al viento cinéreo…

Deslumbre en oro cano su espuma blanca y rota
caliginosa marea ofuscada en la derrota
del ébano luciente que roba el paraíso
admite del velamen su propia voz, no müere
adicta al cielo leve del sol donde deslizo
errante murmullo atroz que vanamente hiere.
Doblez de peña errante, su claro, su bandera
alea en la penumbra su riqueza gana, y en sombra es Primavera…

Paseante voz prepara de su boca la quimera
de un oprobio nato que deslumbra ya su testa
sobre el jolgorio natural que el unicornio asesta
herrumbre prenupcial que la vanguardia era…
Rocín que muere quedo galopando sin aliento
su perfume entre las rosas, sus rosas hechas viento,
del alerce sobre el páramo, juglar echas un verso
sobre el doblez de la espiga, cantando inmerso…

Prepara voz paloma, fragante hecha de frágil
estocada primavera de luna y noche, vuelve
sobre tus pasos ya se eleva tu virtud, devuelve
la odisea de tu luz, rincón desnudo, fértil…
Sedienta noche vuelve sobre aroma que no pesa
y noche y no paloma la bruma que no cesa
distanciando al verbo errátil su distancia inmersa
venerando más el dote de tu luna tersa…

Creciente mar inmerso, bastión que no embellece
campana del blasón donde se escude el homenaje
alusión de toda flor donde es flor todo paraje
arredrando de fortuna la prisión donde perece…
Aliaba un goce etéreo, púrpura no nïeva
bastión hecho campana y sutil me eleva
rompiente del oleaje que su bruna escarcha
odisea vuelve al son, muda no marcha…

Verde es el aliento de los bosques sobre el viaje
lentitud el mar procrea su virtud, oleaje,
espuma al ala herida, multitud, ropaje
de su huella arremetida, celada en vuestro viaje…
Helecho en asunción no más gota de su gota
la erosión vuelta nocturna de celada nota,
embebido y ya no atento al murmullo pordiosero
del emblema no primero, su ofuscado cero…

Alusión a la discorde llamarada, no pernocta,
de su ilusiva parsimonia, su virtud, tan docta…

Engalanada poesía de hermosas metáforas.

Siempre es un susurro que se siente.

Un abrazo para ti y tu poesía.

Muchas gracias, Leyre...!!!! Un abrazo enorme, bella Poetisa...!!!!


Ale