IMAGINA QUE TE QUIERO.

Y sin embargo,
deseo ascender hasta el extremo
de un largo tiempo en lejanía,
a ese trémulo caos
de picos punzantes,
a mi azorada historia
al fragor que incendió mis montes
mis calles y todo el vértigo.

Imagina que te quiero
en presencia o desvanecido en aire
y masticar los destellos en la noche.

En tu bruma y conservar tu calor
bajo el nogal ancho, imagina.

Imagina,
un búho con acento torpe
por la distancia,
incendiando las ramas verdes
de esperanzas.

Imagina, sólo imagina
que tal vez te quiera,
pero nadie vuelve nunca
cuando ha pasado,
en esta soledad sin fin bajo los astros.

IMAGINA...
Si tan solo se pudiera imaginar que te quiere la abadía de su ser...
eso ya sería mucho.
Vaya LEYRE, me gustó imaginar la situación que nos retratan tus versos, que hermoso melancólico, te felicito y te sigo leyendo.

Gracias Kaina, que no nos falte la imaginación para crear.
Besos.

Ojalá reinita, ojalá... jamás deje de danzar con la pluma que se abraza a nuestra mano incesante de crear.

qué paisaje más poético nos has dibujado aquí, sin palabras, mejor contemplémoslo!