OSCAR ALBERTO...

Dicen que la sabiduría es un don.
Que mil años nunca es suficiente para aprender.
Que se debe ser humilde de corazón,
y hervoroso de sentimientos.

Dicen que la franqueza no se otorga.
Que se nace con ese misterio,
que es difícil, casi escaso,
y que los Dioses dieron el consentimiento.

Dicen que la pasión de una pluma,
elige al poeta con dictamen estricto,
La dialéctica debe ser perfecta,
Y diáfano, el juicio.

Dicen que usted, señor Oscar,
Es maestre entre los maestros.
Que no habrá poeta igual,
De tan bellos sentimientos.