Noche encantada

A tu miel corro, la voz de mi huida
en el sofreno del légamo de una tarde hambrienta
y en el sigilo de tu alma despierta
sobre el rubor de una quimera decidida.
Alea la víspera del mundo, las manzanas
de una copia silente entre tus besos,
cual velamen obsequioso de púrpuras regresos
oleajes de verdor, espumas lozanas…

Noche que separa las estrellas de un abismo
donde la explanada de mi vista es el ocaso
de un semblante en el brillo del abrazo
mil estrellas son diez mil, y soy yo mismo.
Gentil amanece ya la aurora decidida
despedida de los claros, despedida
y ala cumbres en tus manos y en tu huida
las nupcias fieles de los soles, tu partida…

Galante asoma en la vertiente de tus ojos
lentas lágrimas que se miran en sí mismas
doblegan alas de dolor contigo mismas
y sucumben al ardor de la Vida en los abrojos.
Contigo se separa de mis ojos la marea
cual sutil enjambre de burbujas que destella
asomo de cristal lo suave en ella,
marea de silicio, ella vuela mientras lea

Y a tu ferviente ocaso las nupcias verdaderas
ébanos son de cristal, las albas ceras.

Que belleza compañero, tú siempre... Tú... el eterno enamorado del amor.
Te quiero, besos y nos estamos leyendo.

Infinitud de cristales hecho remolinos...espirales de suspiros...
Bella y encantada noche que tus versos recogen...precioso...
Un gusto amigo...te abrazo con todo mi cariño...

Un abrazo Darkness, Nancy querida!!!!!

Con todo mi cariño también, un sueño de azaleas, frugal sobre la cena del pasto a tu dulzura que como un beso a tu miel pura arriba las loas de mi canto perfumado... de mi canto anonadado, como silbido que pronuncia el oro casto, el brillo del sol cual tea en una flor mimada en llanto de su rocío quebranto las mil olas de cálida la espuma a tu silencio como una huella donde ansío admirar a la palabra que se esconde en tu miel cual suave amarra... de mil buques perdidos... lontananza de la suave voz que admiro... cual bribón destellando una guitarra...

Gracias Nancy!!!!

Muchísimas gracias querida Kaina!!!!! Un abrazote!!!!!

Camina en el regazo de la aurora, la sórdida batalla del semblante, que en un solo quieto instante, deslumbra su acechanza con gotas de dormido sol, enjambre de oro, sobre el quieto rubor de la maleza, cual abrir de la belleza... aúna dócil gentileza...

Muchísimas gracias amiga!!!!!