Cultivando la rosa de tus labios
Mi amor busca el regazo de tu rosa
para saciar la sed de mi arrebato,
y en su caudal buscar tu tallo, goza
la sed, mi amor, y mi ventura, trato
de no saciar mi ruiseñor, de cantos en el valle.
Y a merced de tu sabor que disipa mi creatura,
vuelta en ágata de flor, se adormece tu figura
increpando con dolor, todo el cielo se avasalle,
El gemido de mi flor, tu suspiro me germine,
tu belleza y tu candor, en mi soplo, la semilla
vuelta enero se cobija, en tus ojos, tu mejilla,
que el ladrón de tu rodilla, en tu vuelo se examine...
Y en tu búsqueda triunfo, con el dédalo de amor,
mis orillas, tu horizonte, en el cielo se terminen,
no hay amor entre la envidia; toda tu alma es una flor;
no hay amor sin un regazo, que las fábulas olviden.
Tu suspiro es en mi pecho golondrina de verano,
y en tu voz tañe el espejo de mi sol frente a tu cuadro
sombras rémoras, la noche, suspiro de tu atardecer
vuelven alas a tu sombra, por mi voz, que ves crecer...
Las estrellas de la noche, vuelven sombras mi suspiro,
y en la cadencia de lo oscuro, mi alma besa claridades.
Claridades en la sombra, que ignoran mi zafiro.
Sólo beso tus estrellas que no detienen nimiedades.
En tu azul canta tu gozo, Oh princesa de Verano!
Y en tu azul canta el crepúsculo, Maravilla de tus manos!
Canta el füego de tu gozo, canta el gozo de tus labios!
Mi zafir envuelve penas cual acecho de tu mano...
Y mi voz persuade estrellas que en tu gozo, no anochecen
sólo el médano de mi alma en tu frío cuenta rosas,
languidecer en tu pelo, como marëas sinuosas,
como el alba en tu cabello, lucen los oros que besen...
Cultivando la sed de mi rosa, han extasïado sus suspiros,
y en sus pétalos, toda rosa pigmentó la sed de tu boca
suspirada en mis latidos, cual rubor mi sed te toca,
endiablada en mis gemidos cual pronunciados respiros...
Mi rosa, has iluminado tus caderas, cual sola muralla
se embellece, y en tus lauros, gentil llama la pradera,
como abastecida luna, la nieve que se halla...
Mi sombra en tu perfume, alcanzó la Primavera.
Cultivé una rosa, una rosa escarlata,
la sed de tu boca, fueron labios de plata...
Mi amor busca el regazo de tu rosa
para saciar la sed de mi arrebato,
y en su caudal buscar tu tallo, goza
la sed, mi amor, y mi ventura, trato
de no saciar mi ruiseñor, de cantos en el valle.
Y a merced de tu sabor que disipa mi creatura,
vuelta en ágata de flor, se adormece tu figura
increpando con dolor, todo el cielo se avasalle,
El gemido de mi flor, tu suspiro me germine,
tu belleza y tu candor, en mi soplo, la semilla
vuelta enero se cobija, en tus ojos, tu mejilla,
que el ladrón de tu rodilla, en tu vuelo se examine...
Y en tu búsqueda triunfo, con el dédalo de amor,
mis orillas, tu horizonte, en el cielo se terminen,
no hay amor entre la envidia; toda tu alma es una flor;
no hay amor sin un regazo, que las fábulas olviden.
Tu suspiro es en mi pecho golondrina de verano,
y en tu voz tañe el espejo de mi sol frente a tu cuadro
sombras rémoras, la noche, suspiro de tu atardecer
vuelven alas a tu sombra, por mi voz, que ves crecer...
Las estrellas de la noche, vuelven sombras mi suspiro,
y en la cadencia de lo oscuro, mi alma besa claridades.
Claridades en la sombra, que ignoran mi zafiro.
Sólo beso tus estrellas que no detienen nimiedades.
En tu azul canta tu gozo, Oh princesa de Verano!
Y en tu azul canta el crepúsculo, Maravilla de tus manos!
Canta el füego de tu gozo, canta el gozo de tus labios!
Mi zafir envuelve penas cual acecho de tu mano...
Y mi voz persuade estrellas que en tu gozo, no anochecen
sólo el médano de mi alma en tu frío cuenta rosas,
languidecer en tu pelo, como marëas sinuosas,
como el alba en tu cabello, lucen los oros que besen...
Cultivando la sed de mi rosa, han extasïado sus suspiros,
y en sus pétalos, toda rosa pigmentó la sed de tu boca
suspirada en mis latidos, cual rubor mi sed te toca,
endiablada en mis gemidos cual pronunciados respiros...
Mi rosa, has iluminado tus caderas, cual sola muralla
se embellece, y en tus lauros, gentil llama la pradera,
como abastecida luna, la nieve que se halla...
Mi sombra en tu perfume, alcanzó la Primavera.
Cultivé una rosa, una rosa escarlata,
la sed de tu boca, fueron labios de plata...
Ayer a las 7:07 am por jorge enrique mantilla
» Los Sabios de Oriente
Miér Ene 15, 2025 3:23 am por caminandobajolalluvia
» MUERTE DEL SILENCIO [Dedicado a García Lorca y seguidores]
Miér Ene 15, 2025 3:07 am por caminandobajolalluvia
» EN TU AMOR
Jue Dic 12, 2024 2:17 pm por eledendo
» MERCADERES DEL TEMPLO
Jue Nov 14, 2024 4:55 am por caminandobajolalluvia
» CREPÚSCULO: breve cántico
Dom Nov 03, 2024 2:26 pm por eledendo
» Del esplendor imposible
Mar Oct 01, 2024 8:03 pm por caminandobajolalluvia
» Del esplendor imposible
Miér Sep 18, 2024 2:45 pm por eledendo
» Te digo adiós
Mar Sep 10, 2024 11:53 pm por kin