Pausada recorro tu rostro
y me detengo en los ojos,
me sumerjo en las pupilas…
como un zahorí pretendo
saber de bruñidos secretos
e inquietas sombras;
quiero de ti infinitas respuestas...
¿Por qué a veces eres
un inmenso erizo que me hiere
con infatigables púas?
¿Por qué te conviertes
en albañil de muros tan amargos?
¿Por qué pretendes con tan filosas tijeras
cortar las alas de mi pensamiento?
¡Cuán extraño eres!
Pues en otros momentos
te conviertes en una vela
que no se fatiga entregando lumbre
o en una armadura medieval
que me defiende de la espada y el grito
o en música que se enamora del tiempo
y me colma de dicha...
¡He de dejarte!
¡Decidí
hacer añicos el espejo!
Delia Checa - 2014
Mendoza, Argentina
De mi libro "Poesía"
Mendoza, Argentina
De mi libro "Poesía"
Hoy a las 9:42 am por jorge enrique mantilla
» La soledad de mi alma
Miér Ene 22, 2025 7:07 am por jorge enrique mantilla
» Los Sabios de Oriente
Miér Ene 15, 2025 3:23 am por caminandobajolalluvia
» MUERTE DEL SILENCIO [Dedicado a García Lorca y seguidores]
Miér Ene 15, 2025 3:07 am por caminandobajolalluvia
» EN TU AMOR
Jue Dic 12, 2024 2:17 pm por eledendo
» MERCADERES DEL TEMPLO
Jue Nov 14, 2024 4:55 am por caminandobajolalluvia
» CREPÚSCULO: breve cántico
Dom Nov 03, 2024 2:26 pm por eledendo
» Del esplendor imposible
Mar Oct 01, 2024 8:03 pm por caminandobajolalluvia
» Del esplendor imposible
Miér Sep 18, 2024 2:45 pm por eledendo