Comparto la luna con tus ojos

Comparto la luna con tus ojos (1)

Comparto sin medida, el estro de mi pluma
con la cadencia que murmuran tus ojos,
en el rastro que hace letra a mis despojos
con el arte de tu soplo, de tu bruma…
Comparto el silencio de mi pluma,
voz que preña, y es contigo ya la luna
mi estandarte es nevado sin su cuna,
en tus manos, Magisterios y Paloma…

Nieva el ala de mi historia, busca el cetro
de mi rosa en tu cabestro, la mañana
por el ala que, bestial, llama a mi espectro
cual golondrina de mi ardor, así, temprana…
Busca la célibe mortaja de su anhelo,
fraguándose en la impronta a mi delirio
con el cortejo de la espuma, de mi cirio
almenar, donde pasea mi desvelo…

Clama mi oro la voluntad de nubes
por donde el cielo no se opaca, ni desvela,
hasta brillar en los astros, Filomela
en las cunas de las albas, donde subes…
Eres acierto de mis noches, y recelas
el rostro impúdico de alas, de panojas
por donde sombras en mis velos, escojas
a levar mi suspiro, y lo conduelas…

Mi alba infiere de tu adusto rocío ufano,
a medrar de tu contorno, la ballesta
de un suspiro que me alarga y que me asesta
con el canto de tu corazón, en mano…
De mi vientre, no la espuma, de mi seso
no se arraiga contra el beso de tu beso,
no hace alarde de mi encomio, de mi ornato
fantasías, en tus sueños, donde mato…

Pulcritud de mi rima esplendorosa,
hace el arma de mi velo contra el alba
y en mis velas, de tu entorno, no me salva
a rispiar caduco ángel, alboroza…
De mi trono de amante, se decora
el esplendor de mi rosa en tu cabestro,
con las alas de mi espuma, de mi estro
congraciado con tus alas, con tu espora…

Oh rosa, que delirio lleva en andas
el suspiro de mi glosa, vuelta ofrenda,
hace alarde de mi cúmulo y mi venda
por sobre el ala de mi albor, tañe en lavandas…
Mis ojos quieren su perfume, dilatar
por sobre el ala de mi rosa, de mi mar,
conglomerar el suspiro de mi alma,
y vestir en mis arpegios, süave calma…

No mi delirio de mi tono, se hace mella
para agraciar el suspiro de mi estrella,
ó cavilar, en su asomo, süaves testas
por el verano, de su monta, de tus crestas…
Arraiga el páramo de rosas, mis resoles,
contra suspiros que son ágatas de lunas
y entre mis plumas, de mi oro, de mis soles
haces ardides, mi sonrisa, mis lagunas…

No te es süave mi delirio, contrapuesto
con el ala de mi sombra, entre mi lira,
adosando mi suspiro, se retira
a besarte con el claro de tu impuesto…
Tañe el vergel, tañe el ascua, mi saeta
confrontada contra el ala de tu miel
de mi rostro nace el estro, mi bajel,
en tu cintura de mi adagio, incompleta…

Puebla el lirio tu Septiembre, así anidado,
en los lirios de mis rosas, enramado…