Huellas
Laberinto de un bosque impenetrable,
pronto iré de la floresta
al concreto de las ciudades hostiles,
donde mi nombre parece otro nombre,
mi cara otra cara.
Mientras tanto los ríos dibujan en la distancia,
en su profundo lecho, en la arena,
en el agua que se guardará más tarde,
inscripciones exactas.
La vida era música, esperada siempre por mí,
el regalo, que doy en extremo, un color de rosa,
lujo en el bosque, las raíces verdes de mi tierra,
y cualquier cosa más un esquema.
De vuelta aparecen alrededor de la vida,
una amalgama de incidentes
que eran y que son,
que no desaparecen,
en plan de dolor,
¿carece de memoria la ilusión?.
Por lo que nos arrastramos,
tanto la vida, tanto la alegría,
el aislamiento y los gritos,
una historia larga complicada,
que se convierte en un regalo.
Al mediodía estalla el sol de verano,
levanto los ojos hacia las dunas y
prometo no realizar arreglos en la arena,
la voz demasiado lejos,
solamente la respiración,
humedad del cuerpo,
que cuando llega el sueño
y los recuerdos, se evapora.
Quijote de la luna,
sin el viento y los molinos,
con frecuencia lejos sí mismo,
qué constituye con sus acciones
la dirección errada para no ir hacia el
horizonte del destino.
Laberinto de un bosque impenetrable,
pronto iré de la floresta
al concreto de las ciudades hostiles,
donde mi nombre parece otro nombre,
mi cara otra cara.
Mientras tanto los ríos dibujan en la distancia,
en su profundo lecho, en la arena,
en el agua que se guardará más tarde,
inscripciones exactas.
La vida era música, esperada siempre por mí,
el regalo, que doy en extremo, un color de rosa,
lujo en el bosque, las raíces verdes de mi tierra,
y cualquier cosa más un esquema.
De vuelta aparecen alrededor de la vida,
una amalgama de incidentes
que eran y que son,
que no desaparecen,
en plan de dolor,
¿carece de memoria la ilusión?.
Por lo que nos arrastramos,
tanto la vida, tanto la alegría,
el aislamiento y los gritos,
una historia larga complicada,
que se convierte en un regalo.
Al mediodía estalla el sol de verano,
levanto los ojos hacia las dunas y
prometo no realizar arreglos en la arena,
la voz demasiado lejos,
solamente la respiración,
humedad del cuerpo,
que cuando llega el sueño
y los recuerdos, se evapora.
Quijote de la luna,
sin el viento y los molinos,
con frecuencia lejos sí mismo,
qué constituye con sus acciones
la dirección errada para no ir hacia el
horizonte del destino.
Miér Mar 13, 2024 10:17 pm por caminandobajolalluvia
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