Destino

Nada significa mi pasado,
el nombre de una mujer oculto en los rincones
de mi vida con un adjetivo de sueño silencioso,
con una agonía en el largo camino a ninguna parte.
Sentí el olor de lo divino,
la dulzura de unos ojos
que lo han vivido todo clavados en mi pecho,
como una tierra de prodigios
que llora los pasos de mi final encuentro.
La sangre danza en el destino que se revela de golpe,
sin piedad para el que se hunde
en el polvo de su nombre
y no puede elegir ya,
su verdad final ante sí mismo.
Por mucho que nos esforcemos siempre será asi,
la historia inmerecidamente marcada
en un eterno camino que retorna en espiral.

Interesantes reflexiones amigo...imágenes excelentes...un gusto leerte.
Un abrazo.

jaja muchas gracias por comentar!!!!!