La fotografía que me envenenó.

Érase mi vida en esa foto
universo infinito en asombro, vivo de color,
andaba yo de día en día enamorada
de la bendita foto que me envenenó.

La sacaba de paseo, cuidaba sus cabellos,
eran tan cándida y dulce que me cautivó.
Comíamos helados en las plazas
en nuestros días, la fotito y yo.

La quería tanto que mi luna me dejó
fue un gran dolor que la noche me abandonara
pero yo a esa fotografía la amaba,
y sólo para ella procuraba satisfacción.

Y seguíamos felices la fotito y yo.

Un día la foto me pidió viajar a Neptuno
una loca aventura -musitaba la desdichada-.
Pero Poseidón también se enfadó,
yo desesperada, salí corriendo tras ella,
cuando de sus mares la excluyó.

La fotito que me envenenó
en tierra firme desapareció;
la busqué por varias lunas,
(aunque se esfumó)
sólo regresó cundida de opioides
... Y la foto y yo?

La foto y yo con crueles andanzas
comprendimos la realidad de la situación,
yo agonizando mi desdicha
ella gozando su trágica autodestrucción.

Pasaron los días y mi foto no era más que dolor
yo comenzaba a sentirme perdida
del amor por la foto, porque me quitaba la vida,
y lo digo literalmente, porque la foto me envenenó.

(Risas).

Siniestra Nostram.

CONOCIENDOTE SINIESTRA, ES TU HUMOR NO CABE DUDA ALGUNA JEJEJEJE

Jé, je; sí. Un poquito de humor. La vida --entre otras cosas-- es reir.
Gracias por tu comentario, Andica.
Recibe un gran abrazo.

siniestro

Ja, ja, ja, ja; vaya que sí está siniestro... un escenario profundo, pero con mi toque de comicidad. Una palabra algunas veces vale más que mil expresiones, Belagardi. Muchísimas gracias por leerme el escrito.
Recibe un gran abrazo.
Siniestra.

me encanta tu estilo Siniestra, pero yo que tu... le hubiera prendido fuego a la fotita dichosa y me saco otra.. con otro... jajajajaja besitos...

Jajajajajaja, Lore... Qué buena solución habría sido esa que propones, lástima no la vi a tiempo... (También es que le tengo mucho miello al fuego). Y aunque hubiera sido atractivo, de verdad, sin esa foto... Quizás hoy sería una simple hoja de otoño ya enterrada en un subsuelo cualesquiera. Es decir, fuera nadie. Hay que ver que de los malos pasos se aprenden cosillas. Al menos "tips" de sobre/super/vivencia. Es una paradoja. No obstante, no me arrepiento ni una sóla pizca del escenario... Sabes por qué? Porque esa foto fui yo.

Béeeso y abrazo, Lore!
Gracias por pasarte por mi escondrijo.
Siniestra.

Leyendo tu poema y los comentarios anteriorea a este, sobre el mismo, te felicito porque muestras que has aprendido a observarte y a reirte de ti misma y eso es mágico, curativo. Felicitaciones

Gráaacias por tus palabras, Reyna Galáctica. Decirte que en efecto no me río de mí misma; mas sí de la circunstancia en la que abordé el tema (en poema alegre, cómico, gracioso) a todas éstas con su comicidad y complicidad. Las heridas que me han marcado con el paso del tiempo y en mi modo actuar/ser puede que algún día se curen, pero desde el inicio han quedado allí... Latentes. Yo creo que todavía voy en proceso de curación. Ahí hago el intento!
Gráaacias de nuevo por tu comentario.

Recibe un cálido abrazo.
Siniestra.

Joder con la foto, la dueña y el ingrato que la sacó!!! De fotos no vive el humano...porque son la perdición...Te congelan la imagen...y mueres de frío e inanición. Gran escrito y saludable humor, amiga...

Gráaaacias por tus buenas palabras, queridísimo amigo Goyito. Es cierto... una fotografía es una única expresión. Ay, morir de frío y de inanición sería complicado. Ya al menos esta foto mutó un poquito, aunque sea un poquito.

Recibe un cálido abrazo!!

AH!! QUE VAINA!!! Mi amiga se dejó envenenar de una ingrata foto!

Que bueno, después de varios días volver a reir.

Jajajaja, sí, mi queridísima amiga Alma. Me encanta que te alegren las letras éstas!!!!! Fantástico!!! El poema alegre o cómico cumplió su función!!! Jajajaja!
Béeeesos y abrazosss amiga.

[b]Hoy que ando por estos lares, me doy de narices con este poema tuyo, querida Siniestra.
¡Joder! Como diría nuestro amigo Sarmiento... No, no es el humor de Don Pedro, que tanto me fascina; aunque también el tuyo deja en mí su impronta... Y sigo: ¡joder! Siniestra, hasta en el humor eres diferente a los demás mortales; a última hora vas a hacer que me lo crea. ¿De verdad eres tan especial...? Sí, se ve que sí; y lo peor de todo es que me gusta que seas tal cual eres. Por ti estoy viviendo nuevas experiencias; quizá ya mis últimas experiencias en la poesía.
Abrazos, querida amiga.

¡Hola, mi querido Neptuno de mis sonrientes mares...! Este es el único con toques de hilaridad que he creado... Y bueno, mi humor es un poco peculiar, sí, jajaja. Me alegra que te agrade mi línea de existencia y que te sirva para mostrarte un mundo retorcido bastante extraño. Lo de ser me encanta... Pero eso de últimas experiencias me hace pensar un poco, ¿cómo que las últimas en la poesía? Aún quedan muchas más, mi queridísimo hidalgo... De sólo pensar que abandonarás tu plectro y pluma sudo frío... No me abandones, por favor.
Abrazos para ti también y gracias por tus palabras. Toma, te regalo una flor: .