El seno obscuro en tu diadema

En el seno obscuro, de la diadema de la noche
se esconde en su maleza su vientre azorado
por el venablo que en la estrella a lo azul luche
jacinto mella lo que su fragancia ha encontrado…
Mirada afín, no luche, sin embargo,
por el destello de su förma, de su embargo
jacinto ruin que ramillete clavellino
produce en el jazmín su nïeve, sol endrino…

Tan oro alcanza en su madeja lentitud,
crisol que mueve aletargando los laúdes
mirada en breve hace jazmines ataúdes
y soles llanos me provocan laxitud…
Mi sol en breve hace alcurnia del celaje
fue manantial de fresca áurea su jinete
donde porta el mar en la espuma clarinete,
jacinto ruin de mi debacle ó de su oleaje…

Sombrío añade poca monta a mis rubíes
que del crepúsculo, lascivos suelen darme
otro rubí, otra mención, que al igualarme
resopla el rojo viento al sol donde tú ríes…
Lo rojo no es el llano, querube a mi montaña
aleve canción diera, palabra aún ermitaña
crisol que en su baluarte esposa la osadía
de ver nacido un día para verter mi mano fría…

Sol al silencio ufane, cual mirada en su mitad,
mi ojo ya la intercala, y es abrupta nimiedad
del suspiro de su vago, atroz vuelo nacarado
entre risas amigables, al suspiro de su mano.
Mi voz tañe el sepulto ardid de flor, airado
robusteciendo la panoja con el mar soberano,
y así eleva torso mi vajel en muda proa
legitimando su flor a mi desnuda loa…

El mar, el mar sucinto en sedes donde bulle lo artesano
es mirada de mi hermano donde anclan querubines
su espoleo de las fugas donde hay olas, sementines
de su brillo en la hermosura ó deidades de tu mano…
Caliginosa el encïerro, de la pluma, así vista
para vestir el oleaje tu tesitura esmaltada
con el destello el arrobo de tu final, aguardada
sobre la sombra, el estribo de mi metal surrealista…

Es arte tu piel, desnuda al llanto y prohíbe
mi muda glosa al engaño desde mi sueño, cohíbe
tal lentitud de tu fuga, desnudo canto besarte
el sol que fuga las olas, y besa mi mudo arte…
Sobre el declive que peña engulle sobre tu corona
diamantes de sol engendrados, para latir tu fortuna,
el mar, las alas del sol, que hacen vïentre en tu cintura
oleaginosa modelo de la palabra en tu albura…

Ariete, escuálido ama de mi silencio que embiste
llanura no provocada a mi silencio que existe,
sobre lo ufano se mella y arde con tu paloma
tan en mi solo resguardo que mi mirada retoma…
Besando, tu nudo de hielo, ó tu figura sombría
hace cielo de mi verano ó tu sombra lenta, ó mía
sobre el desvelo que es llano, a tu palabra lo endulce
caliginosa en tu empello, ó en el ardor que compulse…

Destello, figura, ardor no cabe y no nïeva,
crisol en tu vientre desnuda, el manantial que se atreva…

Muchas gracias, amiga!!!! Un abrazo grande, Poetisa bella!!!!

Besos!!!!

Un abrazo!!! A la nostra felichità!!!!

Qué lindo compartir poesíaaa!!!!

Felicidades, amiga!!!!

"Sombrío añade poca monta a mis rubíes
que del crepúsculo, lascivos suelen darme
otro rubí, otra mención, que al igualarme
resopla el rojo viento al sol donde tú ríes…"

Oposición siempre valedera,en tus versos fascinantes
Saludos.

Muchas gracias, Miguel!!!! Un abrazo grande, amigo Poeta!!!!

Felicidades y cariños, Miguel!!!!


Te sigo leyendo, sin dudas, Poeta!!!!