Para mi amada,
Dulce, Oh dulce entonas el atavío a mi alma,
reluce en tu cuerpo, efímero, delgado, de ser
me doblega tu alcurnia, tu dócil crecer
frente a las espumas que a tu amado es la calma...
Arrimas sendero de miel; besas mi mano, laurel;
forjas con aguas intactas, so tu verano en papel:
y viertes sedosas murallas, de sombra tus ojos
trascienden abrojos desnudos, desnuda me halagas
y besas conforme tus alas, las rosas en mis despojos
tan cïegas de rotas murallas, sufrir no me hagas...
Inviertes el navío intacto, querellas no arden en vano,
trasluces cubierta sesgado, sesgado el viento en tu mano,
tras notas alerces reciben, el toque sedado de viento:
Paloma: me vuelves aliento! Aliento que funde el aliento!
Soy sólo un pajarillo a ti atado, atado al pulgar de tu mano,
ó al índice, me frenas el vüelo, y aclaras conmigo el anzuelo!
Mi loco vuelo se enamora de ti y de tu mano, beso tu pelo,
me tomas caricias en tu palma, me dejas volar en vano...
Vuelvo a ti, prendado de júbilo, Torcaza herida radiante,
enamorado estoy de ti. Mi anhelo dibuja triunfante,
en tus ojos los ojos de estrellas, que surcan tu oro
y en robles, espinos, demoro, mi broquel canoro,
en otras perlas de vïento, para tu consuelo, mi intento,
palabras de goces, rendidas, al sólido vuelo del viento...
Desluce mi boca tu Aurora, palabra conmigo atesoras,
naval de tus luces y rocas, entablan conmigo las horas,
y besas contigo el aliento, mi júbilo perdido en tu mano:
Pajarillo de ardor en tu vuelo, perdido en tu Verano!
Aclara tu beso si noche, estima el Sol de tu düeño,
Golondrina de rosas, isleño, clamor de sonido y de bruces,
ya truecan guirnaldas en vano, coloridas de mi empeño,
por donde me trazas el sueño, cardumen de fiesta y de luces!
Besando tu boca, desvelo. Ya sueño, la fiesta en tu boca!
Sueño el mirar de tus rocas, Sirena de júbilo y vïento!
Me cuestas el oro del mar, trasluces un épico tormento,
mi ansia en tu figura de mar... Desboca el sonido que toca!
Desmedido al ocaso no ríe: en tu crepúsculo de amor,
mi risa por tu beso tan loco, desboca el púrpura sol.
Y en beso de ágata, tiempo, sagaz espíritu, resol,
invoca tus élitros, nubes, de ocaso, de luna y amor...
Besa tu río mi verano, tendido en el lecho de tu ansia
mi boca besa tu estancia, me río en el colchón del mar!
Mis bucles, empero, no süeñan: sueñan tu despertar,
por si me oyes de lejos, y quieres suspirar mi cadencia...
O si otro retiro de mar, incógnito a tu vez suspirado,
entona en lúbrico amado, tonante de glosa y estrado:
coloquial en su verso, divino, de música en mi pasado,
versar a tu oído decido, vulnerar el néctar acedo...
Mi roto ademán primero, busca el júbilo por volcar
tu sendero a mi suspirar, y el tálamo roto, primero...
Pero pierdo en tus bucles, aromas, de jugo efímero,
cadencia en tus bucles, primero: fragancias del mar...!
Mi boca endulza en tu boca, las bocas del viento, juglar
pasïvas de ardor y de esmero, cadencias de oro vulgar!
Mi oído en ti se enamora, y espera tu verso divino,
alerce que en bosque, transido, añora a tu verso, lugar
y vierte en tu suspirar, palabras sendas de vino,
ó rotas inercias, suspiro, que glosas adviertan pasar...!
Mi boca espera tu beso, mi espíritu rendido fregar,
por tus algas de luz, y de cándido verso, en ti doblegar...
Dulce, Oh dulce entonas el atavío a mi alma,
reluce en tu cuerpo, efímero, delgado, de ser
me doblega tu alcurnia, tu dócil crecer
frente a las espumas que a tu amado es la calma...
Arrimas sendero de miel; besas mi mano, laurel;
forjas con aguas intactas, so tu verano en papel:
y viertes sedosas murallas, de sombra tus ojos
trascienden abrojos desnudos, desnuda me halagas
y besas conforme tus alas, las rosas en mis despojos
tan cïegas de rotas murallas, sufrir no me hagas...
Inviertes el navío intacto, querellas no arden en vano,
trasluces cubierta sesgado, sesgado el viento en tu mano,
tras notas alerces reciben, el toque sedado de viento:
Paloma: me vuelves aliento! Aliento que funde el aliento!
Soy sólo un pajarillo a ti atado, atado al pulgar de tu mano,
ó al índice, me frenas el vüelo, y aclaras conmigo el anzuelo!
Mi loco vuelo se enamora de ti y de tu mano, beso tu pelo,
me tomas caricias en tu palma, me dejas volar en vano...
Vuelvo a ti, prendado de júbilo, Torcaza herida radiante,
enamorado estoy de ti. Mi anhelo dibuja triunfante,
en tus ojos los ojos de estrellas, que surcan tu oro
y en robles, espinos, demoro, mi broquel canoro,
en otras perlas de vïento, para tu consuelo, mi intento,
palabras de goces, rendidas, al sólido vuelo del viento...
Desluce mi boca tu Aurora, palabra conmigo atesoras,
naval de tus luces y rocas, entablan conmigo las horas,
y besas contigo el aliento, mi júbilo perdido en tu mano:
Pajarillo de ardor en tu vuelo, perdido en tu Verano!
Aclara tu beso si noche, estima el Sol de tu düeño,
Golondrina de rosas, isleño, clamor de sonido y de bruces,
ya truecan guirnaldas en vano, coloridas de mi empeño,
por donde me trazas el sueño, cardumen de fiesta y de luces!
Besando tu boca, desvelo. Ya sueño, la fiesta en tu boca!
Sueño el mirar de tus rocas, Sirena de júbilo y vïento!
Me cuestas el oro del mar, trasluces un épico tormento,
mi ansia en tu figura de mar... Desboca el sonido que toca!
Desmedido al ocaso no ríe: en tu crepúsculo de amor,
mi risa por tu beso tan loco, desboca el púrpura sol.
Y en beso de ágata, tiempo, sagaz espíritu, resol,
invoca tus élitros, nubes, de ocaso, de luna y amor...
Besa tu río mi verano, tendido en el lecho de tu ansia
mi boca besa tu estancia, me río en el colchón del mar!
Mis bucles, empero, no süeñan: sueñan tu despertar,
por si me oyes de lejos, y quieres suspirar mi cadencia...
O si otro retiro de mar, incógnito a tu vez suspirado,
entona en lúbrico amado, tonante de glosa y estrado:
coloquial en su verso, divino, de música en mi pasado,
versar a tu oído decido, vulnerar el néctar acedo...
Mi roto ademán primero, busca el júbilo por volcar
tu sendero a mi suspirar, y el tálamo roto, primero...
Pero pierdo en tus bucles, aromas, de jugo efímero,
cadencia en tus bucles, primero: fragancias del mar...!
Mi boca endulza en tu boca, las bocas del viento, juglar
pasïvas de ardor y de esmero, cadencias de oro vulgar!
Mi oído en ti se enamora, y espera tu verso divino,
alerce que en bosque, transido, añora a tu verso, lugar
y vierte en tu suspirar, palabras sendas de vino,
ó rotas inercias, suspiro, que glosas adviertan pasar...!
Mi boca espera tu beso, mi espíritu rendido fregar,
por tus algas de luz, y de cándido verso, en ti doblegar...
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