Desnudo el claro
Al acecho busca el claro su templanza,
sólo el predio en el perfil de su agonía
mientras ruge su pretil de fantasía
la noche cela, casta, su inmortal balanza…
Encima llana cresta, de su mar, entonces,
su llanura verde, contra el mar de bronces,
y asesta el negro trago su fugaz memoria
lejanía inmersa a su redil, su historia…
Desde su canto hendido ya la fragua acose,
de su murmullo gualdo, ya por pleitesía
desde su amor, fracaso, su rojo me extasía
tan soberano, ruin, madeja que se esboce,
tronchando mi oro gualdo, desde mi luz, decena
cual extasïada arena, de amor, de sombra pruna
de alado ruiseñor, de sombras enajena,
mirada que envenena, de toda flor, a una…
Aguardo de su seña, bandida mente acoja
mirada que sonroja, matices en lo gualdo,
recóndita tarea de ver mi ardor, mi saldo
transida en mi universo, de amores que me escoja…
Tus besos son pasiones, que besan oro: rosas
que al latir frondosas, esculpen tu diadema,
y buscan en tus labios moradas tan gozosas
que frenan con tus besos, afrentas y el poema…
Escoplo en sus rubíes, dos picos en las aves,
tus manos son ahínco de nuevas vanidades
son trova de poemas, que cantan tus verdades,
y azoran con tus besos, tus labios süaves…
Irisan con tu goce, las sombras no son cautas
erigen tu mirada: son noches acechadas,
por lunas de cristal, estrellas en tus flautas,
las sombras de tus ojos, son soles, mudas hadas…
-Hablaré más de tus ojos-: son cielos, que en la tierra
virtudes de oro mella, cabalgan mi contienda,
vigilan a mis versos, y a mi poema encierra,
solemnes tragos dulces, de amor hacia la ofrenda…
Tus ojos, dos claveles, de cielo lacerados,
enjutan todas mieles, de sol, acero y fuga
y hacinan con tus besos, mejilla que madruga,
de sombras en tu almohada, de pechos acerados…
La ruina es el destello que arroba mi semblanza
de robo en la maleza, acorde a epifanía
de ver en tu semblante latir la ciencia mía,
ó el cielo en tu diamante, perder en la esperanza…
A cielos mis cometas, desnudas aves vüelen,
ardïendo en la penumbra, los cántaros se vierten
y ciegan esmeraldas, que bañan, ó te duelen,
latir mudo mi centro, latidos se revierten…
Espuma a corazones, helechos de dosel,
de espera en la penumbra, a gatas, sin sostén
de ver muda, perpleja, la voz de tu satén
en la mirada enhiesta, mi ósculo y cordel…
Tus pasos hacen sueños, que velan las distancias,
y süeñan las arenas, desnudas, los silencios
arenas tan desnudas, en sombras y palacios,
arenas que son sombra, y miel, todas mis ansias…
Desnudo el claro de tus ojos en la tea,
mis ojos claros son, desnudan la tarea...
Al acecho busca el claro su templanza,
sólo el predio en el perfil de su agonía
mientras ruge su pretil de fantasía
la noche cela, casta, su inmortal balanza…
Encima llana cresta, de su mar, entonces,
su llanura verde, contra el mar de bronces,
y asesta el negro trago su fugaz memoria
lejanía inmersa a su redil, su historia…
Desde su canto hendido ya la fragua acose,
de su murmullo gualdo, ya por pleitesía
desde su amor, fracaso, su rojo me extasía
tan soberano, ruin, madeja que se esboce,
tronchando mi oro gualdo, desde mi luz, decena
cual extasïada arena, de amor, de sombra pruna
de alado ruiseñor, de sombras enajena,
mirada que envenena, de toda flor, a una…
Aguardo de su seña, bandida mente acoja
mirada que sonroja, matices en lo gualdo,
recóndita tarea de ver mi ardor, mi saldo
transida en mi universo, de amores que me escoja…
Tus besos son pasiones, que besan oro: rosas
que al latir frondosas, esculpen tu diadema,
y buscan en tus labios moradas tan gozosas
que frenan con tus besos, afrentas y el poema…
Escoplo en sus rubíes, dos picos en las aves,
tus manos son ahínco de nuevas vanidades
son trova de poemas, que cantan tus verdades,
y azoran con tus besos, tus labios süaves…
Irisan con tu goce, las sombras no son cautas
erigen tu mirada: son noches acechadas,
por lunas de cristal, estrellas en tus flautas,
las sombras de tus ojos, son soles, mudas hadas…
-Hablaré más de tus ojos-: son cielos, que en la tierra
virtudes de oro mella, cabalgan mi contienda,
vigilan a mis versos, y a mi poema encierra,
solemnes tragos dulces, de amor hacia la ofrenda…
Tus ojos, dos claveles, de cielo lacerados,
enjutan todas mieles, de sol, acero y fuga
y hacinan con tus besos, mejilla que madruga,
de sombras en tu almohada, de pechos acerados…
La ruina es el destello que arroba mi semblanza
de robo en la maleza, acorde a epifanía
de ver en tu semblante latir la ciencia mía,
ó el cielo en tu diamante, perder en la esperanza…
A cielos mis cometas, desnudas aves vüelen,
ardïendo en la penumbra, los cántaros se vierten
y ciegan esmeraldas, que bañan, ó te duelen,
latir mudo mi centro, latidos se revierten…
Espuma a corazones, helechos de dosel,
de espera en la penumbra, a gatas, sin sostén
de ver muda, perpleja, la voz de tu satén
en la mirada enhiesta, mi ósculo y cordel…
Tus pasos hacen sueños, que velan las distancias,
y süeñan las arenas, desnudas, los silencios
arenas tan desnudas, en sombras y palacios,
arenas que son sombra, y miel, todas mis ansias…
Desnudo el claro de tus ojos en la tea,
mis ojos claros son, desnudan la tarea...
Miér Abr 17, 2024 4:52 pm por caminandobajolalluvia
» Déjame unir mi mano con la tuya...
Miér Abr 17, 2024 4:50 pm por caminandobajolalluvia
» Tu rostro...
Lun Abr 15, 2024 3:55 am por caminandobajolalluvia
» Memoria de tu luz, cuerpo bohemio...
Mar Abr 09, 2024 9:05 pm por caminandobajolalluvia
» Mi ciudad
Jue Abr 04, 2024 1:08 pm por caminandobajolalluvia
» Mujer -reclamo tus rosas-
Jue Abr 04, 2024 1:02 pm por caminandobajolalluvia
» La huella del amor...
Jue Abr 04, 2024 1:01 pm por caminandobajolalluvia
» Desnuda cadencia...
Jue Abr 04, 2024 12:59 pm por caminandobajolalluvia
» Son claveles...
Jue Abr 04, 2024 12:55 pm por caminandobajolalluvia