Desdémona.-

¿Para qué pedirte amor?
si lo nuestro;
es solo alcohol y sexo

así que también;

¿cómo para qué la necesidad
de ejercerte violencia con contradicciones?

basta saber de aquel
tu grito bélico
vomitado contra tu voluntad

chorreando en las escaleras

de todos los rincones
donde te presumiste alegre

y que al final de la guerra y ya decodificado,
en la mañana de desnudos incómodos,
con el alba de arrepentimientos a media luz
en la cama llena de ácido,
con la piel fecunda por resaca,
en el vientre orinado de mareo,
con la exótica danza del labio letrina
y el beso fecal acompañando la migraña,

aún por encima de todas esas tumbas
alcanzo a deducir el jeroglífico del añejo berrido
que se cobija rupestre en tus gargantas

cuando después de tantas y tantas tandas de cebada
en esa mentada de madre matutina que me lanzas; lo presiento

es cuando no sabes ni dónde tienes la rostro
es cuando no sabes ni dónde empieza el maquillaje
y termina la llaga y su carcomido rastro

es cuando no sabes si estás viva o muerta
es cuando no sabes si es esperma o son larvas espesas
es cuando no sabes si ese orificio ya lo llevabas o acaba de ser inaugurado

justo ahí es donde percibo un; “te amo”
uno de esos en val mute,
ahogado
es un “te amo” espontáneo
que sin necesidad de tiempos
sin necesidad de cenas ni crías
sin necesidad de pláticas y políticas
sin necesidad de regionalismos y de religiones
sin necesidad de costosos salarios o fastuosos itinerarios
sin necesidad de nada; nos llena
callamos pena con el pene
y bajamos la guardia con la vanguardia elástica de la vagina

en nuestra delirante alucinación de fin de semana
nos brincamos años dependiendo para conseguir;

un te amo; sin falacias
un te amo; sin compromiso
un te amo; que sabe a “sin embargos”
uno con más de tres puntos suspensivos
pero sin continuaciones rancias

un te amo; que suena a vete y no vuelvas
no a me mato si te largas…

un te amo; que parece un mandato de cunnilingus
un te amo; que huele a leche agria y no a orgasmo fingido
un te amo; de esos en los que no se siente nada al decirlos
pero que no evita el conmocione de quien lo escucha

un te amo; no clínico
un te amo; sí cínico, de los que primero te cogen y luego te embriagan
un te amo; para conseguir sodomía o dar por el lado que sea con indiferencia y sin saliva
un te amo; pero se me antoja tu amigo o seduciré a tu prima

un te amo; de quimeras
un te amo; de brindis
un te amo; de hagámoslo ahora que ya se acabó el whiskey
o tómame en el parque con el pretexto de la primavera

a eso me suena tu grosería
tempranera
principia
la que encabeza mis decapitadas mentes
al reclamarme
que no te llevé a casa
que no encuentras el motivo
que no bebiste lo suficiente
que no me puse preservativo
y que al final solo para eso el cuerpo nos entrelaza

qué importan esos delirios
si sé que me amas
porque al final; ¿para qué te pido amor?
si la juerga en la que nos suicidamos,
es menos dañina
y hay mucho más diversión sin la monotonía del compromiso.

por; Hoz Goliardo Leudnadez
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Siempre jugando con el ángel negro mi Hoz, sigue jugando con él, solo no permitas que penetre en ti. Un fuerte abrazo a esa alma que tanto quiero y admiro, por su rebeldía y fuerza para saber llevar un SI bien puesto a casi todo.

Uf, qué oscuridad nos dejas, compañera, qué mundos más salvajes y descorazonados, me has dejado sin aliento, retrato de lo que no debemos ser pero somos? registro de los límites del abismo humano? Se agradece tu fuerza y tu verdad, recibe mi saludo y mi aliento.-