ROMANCE DEL LABRIEGO

ROMANCE DEL LABRIEGO


Espera un poco labriego…
voy a darte mis quehaceres:
Los surcos que yo pinté
con mis versos en papeles
para que junto a los tuyos,
—esos surcos que te quieren,
le den un beso a la tierra
y una palmada a tus bueyes.

Llévalos en tu morral
o ponlos junto al machete;
pero quiero que estos versos
a tu parcela los lleves
para pintarse de hierba
—del campo esperanza verde—
y se llenen de cristales
con el rocío celeste,
como ayer mis genitores
con los anhelos de siempre;
¡Que hay cosas que el corazón
en sus adentros retiene,
y hay raíces que germinan
como vástagos perennes!

Espera un poco labriego…
voy a darte mis quehaceres.

Quiero que al llegar el tiempo
con tus semillas los siembres;
que se nutran con la tierra,
y a tu cuidado paciente
vaya madurando el fruto
que a multitudes consuele.

Lo tuyo es labrar la tierra;
lo mío, escribir papeles.
Tú caminas cabizbajo
y el surco ágil remueves;
yo voy contemplando todo
el horizonte extenderse.
Pero quiero que mis versos
entre los surcos los siembres
y crezcan mirando al cielo
como las cañas tan verdes
que llevan en sus adentros
sabor de flores y mieles.

Espera un poco labriego…
voy a darte mis quehaceres.

Quehaceres que no te duelan
ni apresuren tus vejeces;
que alivien tus pies cansados
y te refresquen la frente;
que mucho has sufrido ya:
Años que pasan y vienen,
herencias que no se acaban,
dolores que aun no mueren,
noches obscuras sin sueño
por el trabajo pendiente,
con una carga en la espalda
y los años en las sienes.

Espera un poco labriego…
quiero ir contigo a ponerme
frente a los surcos del campo;
tendré en mi mano el machete,
una esperanza en la vista
y el coraje de mi gente,
mil años resucitados
y una ilusión que ponerme.

¡Espera un poco labriego…
voy a tomar tus quehaceres!


Jonathan Mateos

Hermoso romance al primer eslabón de nuestra cadena de producción... al decir de Roa Bastos..."es esa la gente que produce todos los bienes y padece todos loa males"...
Es muy justo que se lo dediques a ellos!!

Felicitaciones, amigo Jonathan.

Al igual que tu, camino por los senderos de los versos, corro por las avenidas que han dejado los grandes, y de vez en cuando, me atrevo a trazar una vereda con mis remedos de versos.
Y tienes razon, por ellos, los campesinos, comemos a diario nuestro pan cotidiano.
Gracias por valorar lo que escribo.

un rico poema... rico en imágenes, en lenguaje, en descripciones... en compañerismo al labriego... me gusta tu forma de escribir Jonathan!

Como escritores, mucho de lo que escribimos es resultado de la observacion, la imaginacion, la reflexion, etc., pero otros como este nacen alli, al lado de la experiencia, y llevan un sello invisible a los ojos pero identificado por el corazon.
Realmente soy afortunado el que pases tu vista por lo que escribo, y mas aun recibir tus breves palabras con un valor tan extenso.
Besos para ti, reyna.