14 de marzo de 1946:
Mi vida comienza a los 10 años, era joven y ansioso. Mis padres eran trabajadores y mi abuelo siempre se quejaba de las cosas, él era italiano, se casó con una mujer de una tribu del Sur de la Patagonia. Muy hermosa era, nunca me podre olvidar de mi pobre abuela, decía que el mundo está conectado con todo y nosotros los seres humanos estamos perdiendo esa conexión que hay con la naturaleza. Creo que cuando empecé a escribir poesías, primero aprendí a respetar a la naturaleza por respeto de mi abuela, pero no lo sé, lo único que sabía era que siempre tenía una gran sensación entre los árboles, como si me hablaran, como si fuera que ellos quieren que haga algo, pero era muy chico en esos tiempos, no sabía nada y no entendía lo que me pasaba en esos tiempos.
A pesar que era una familia trabajadora, eran escritores. Nunca hicieron un libro y mi madre me decía que hacer un libro es cuestión de trabajo y que no podían porque tenían que alimentar a la familia y que encima lo hacían porque amaban la poesía. Así se conocieron mis padres en mi opinión, mi padre me dijo que fue en una pequeña librería, decía que nunca se podía olvidar esos momentos, mi madre estaba sentada en una mesa, las luces del Sol iluminaba su belleza y mientras eso sucedía, ella escribía un poema de amor. Es lo que me acuerdo de eso días.
Otras cosas que me acuerdo y que nunca me olvidare es donde vivíamos, fue elegido por mi abuelo el lugar. Una casa en un pueblo que tenía su propia cultura, las personas eran personas respetables y no había ni un perro que este abandonado, ya que en ese lugar había un día especial para los perros y gatos y se celebraban con sus mascotas.
Pueblo de Salta, habitantes que era también familia, jamás se olvidan esas personas, porque no existía el miedo, la violencia o la discriminación.
19 de Marzo de 1946:
Con el tiempo lluvioso, tenía ganas de escribir más de mi vida, pero ya conté más de lo normal la última vez que escribí, por algún motivo quise escribir las buenas cosas de mi familia y el lugar donde estaba, eso es bueno. Es bueno reconocer cosas que uno algunas veces no acepta, pero al final lo terminara aceptando, porque todo lo que crees que es malo es bueno para otro y si esa persona lo considera bueno, se te apega y te hace creer que lo malo es bueno y lo bueno es malo.
Hoy he escrito nos cuantos poemas, mucho de amor, aunque no tengo ni una musa, pero es una pasión escribir algo tan lindo como el amor. Después estuve pensando en toda la mañana cosas de la vida pasada que no he escrito anteriormente, me olvide lo que dijo mi abuelo después de su fallecimiento, lo dijo en italiano, pero yo no sabía fue algo así como “So poeta bambino forte, non perdono mai speranza”. Yo llore mucho cuando mi abuelo falleció, a pesar que éramos diferentes, aunque se quejaba siempre o estaba siempre enojado, siempre me cayó bien el abuelo. Tenía solo trece años y como dije antes nunca entendida nada.
Ahora 6 años más tarde estoy aquí en Mar del Plata, una ciudad que solo hay personas ricas y el puerto es muy lindo. Te da mucha inspiración ver el mar, es la primera vez que lo veo y es muy frio cuando los toque con mis pies el agua y muy caliente estaba la arena.
Trabajo en un puerto, es una de las fábricas y cada vez que salgo, veo una hermosa mujer que camina en la misma calle. Me di cuenta que trabaja en un puesto de café, pero no voy a verla porque me da un poco de timidez hablarle, algunas veces voy a tomar un café y ella me atiende empiezo a tartamudear y ella se ríe, pero es una risa que no te molesta porque no es una burla o una falta de respeto. Era momentos que no hacia feliz a mí y ella, a pesar que no nos conocíamos.
Lo que quiero es estar con ella y tener un buen futuro.
Mi vida comienza a los 10 años, era joven y ansioso. Mis padres eran trabajadores y mi abuelo siempre se quejaba de las cosas, él era italiano, se casó con una mujer de una tribu del Sur de la Patagonia. Muy hermosa era, nunca me podre olvidar de mi pobre abuela, decía que el mundo está conectado con todo y nosotros los seres humanos estamos perdiendo esa conexión que hay con la naturaleza. Creo que cuando empecé a escribir poesías, primero aprendí a respetar a la naturaleza por respeto de mi abuela, pero no lo sé, lo único que sabía era que siempre tenía una gran sensación entre los árboles, como si me hablaran, como si fuera que ellos quieren que haga algo, pero era muy chico en esos tiempos, no sabía nada y no entendía lo que me pasaba en esos tiempos.
A pesar que era una familia trabajadora, eran escritores. Nunca hicieron un libro y mi madre me decía que hacer un libro es cuestión de trabajo y que no podían porque tenían que alimentar a la familia y que encima lo hacían porque amaban la poesía. Así se conocieron mis padres en mi opinión, mi padre me dijo que fue en una pequeña librería, decía que nunca se podía olvidar esos momentos, mi madre estaba sentada en una mesa, las luces del Sol iluminaba su belleza y mientras eso sucedía, ella escribía un poema de amor. Es lo que me acuerdo de eso días.
Otras cosas que me acuerdo y que nunca me olvidare es donde vivíamos, fue elegido por mi abuelo el lugar. Una casa en un pueblo que tenía su propia cultura, las personas eran personas respetables y no había ni un perro que este abandonado, ya que en ese lugar había un día especial para los perros y gatos y se celebraban con sus mascotas.
Pueblo de Salta, habitantes que era también familia, jamás se olvidan esas personas, porque no existía el miedo, la violencia o la discriminación.
19 de Marzo de 1946:
Con el tiempo lluvioso, tenía ganas de escribir más de mi vida, pero ya conté más de lo normal la última vez que escribí, por algún motivo quise escribir las buenas cosas de mi familia y el lugar donde estaba, eso es bueno. Es bueno reconocer cosas que uno algunas veces no acepta, pero al final lo terminara aceptando, porque todo lo que crees que es malo es bueno para otro y si esa persona lo considera bueno, se te apega y te hace creer que lo malo es bueno y lo bueno es malo.
Hoy he escrito nos cuantos poemas, mucho de amor, aunque no tengo ni una musa, pero es una pasión escribir algo tan lindo como el amor. Después estuve pensando en toda la mañana cosas de la vida pasada que no he escrito anteriormente, me olvide lo que dijo mi abuelo después de su fallecimiento, lo dijo en italiano, pero yo no sabía fue algo así como “So poeta bambino forte, non perdono mai speranza”. Yo llore mucho cuando mi abuelo falleció, a pesar que éramos diferentes, aunque se quejaba siempre o estaba siempre enojado, siempre me cayó bien el abuelo. Tenía solo trece años y como dije antes nunca entendida nada.
Ahora 6 años más tarde estoy aquí en Mar del Plata, una ciudad que solo hay personas ricas y el puerto es muy lindo. Te da mucha inspiración ver el mar, es la primera vez que lo veo y es muy frio cuando los toque con mis pies el agua y muy caliente estaba la arena.
Trabajo en un puerto, es una de las fábricas y cada vez que salgo, veo una hermosa mujer que camina en la misma calle. Me di cuenta que trabaja en un puesto de café, pero no voy a verla porque me da un poco de timidez hablarle, algunas veces voy a tomar un café y ella me atiende empiezo a tartamudear y ella se ríe, pero es una risa que no te molesta porque no es una burla o una falta de respeto. Era momentos que no hacia feliz a mí y ella, a pesar que no nos conocíamos.
Lo que quiero es estar con ella y tener un buen futuro.
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